Las semanas habían pasado luego de ese suceso bastante desagradable, a pesar de que siempre le cuento todo a mi abuelo, está vez decidí no hacerlo, primero por qué no quise preocuparlo, además se defenderme por mi misma, también supe que habían castigado a Weasley quien no logro justificar nada de lo que dijo, ni tampoco culparme.
Habia acabado la clase de Herbologia con la que no me llevaba muy bien, tenía buenas notas pero no lo suficientemente según mi abuelo.
Casi era medio día, con Daphne caminábamos hacía el gran comedor para poder almorzar, mis amigos se habían adelantado asi que solo faltabamos nosotras.
Ella se sentó en medio de Astoria y Theo mientras que yo estaba al lado de Tom y Adrián, quien últimamente pasaba bastante tiempo con nuestro grupo.
El es agradable aunque casi ni tengo la oportunidad de hablar con el, hablo más con Marcus quien es muy divertido y según el soy la "Princesita de las serpientes".
Al sentarme en nuestra mesa, note como Harry veía a Draco con odio lo cual es algo normal, pero su mirada fue más severa, el se veía verdaderamente enojado.
—¿Que sucedió?—Pregunto Daphne, quien también estaba extranada por el comportamiento de los leones y nuestros amigos.
—Nada—Respondio fríamente Draco.
Por reflejó mire a mis amigos para intentar buscar una explicación, la cual no encontré.
—Por que Harry los ve asi&Harry aparto la mirada al ver que lo estaba viendo.
—No es importante—Era extraño, supuse que lo estaban molestando o algo, pero no creia, cuando ambos se molestaban mutuamente no se enfadaban tanto para que estuviera apunto de llegar a los golpes.
—Tom...—Lo llamé, esperando una explicación.
—No es nada, Ariana—Respondio fríamente.
Me quedé callada, ya no era el momento de seguir preguntando aunque admitió que su acción se me hizo extraña.
Algo incómoda, me dispuse a comer.
Tom Riddle
(Narrador)⎶⎶⎶⎶⎶⎶⎶⎶⎶⎶⎶⎶⎶⎶⎶⎶⎶⎶⎶⎶⎶⎶⎶
Caminaba en dirección del gran comedor junto con Draco, habíamos terminado la clase de Herbologia, lo cual era abrumante.
Solo a los idiotas les gusta esa materia.
Nos sentamos en la mesa de Slytherin mientras que conversábamos y comíamos.
Gryffindor también se incorporaba al gran comedor, lastimosamente también compartíamos clases con ellos.
Observé cómo Malfoy enderezó su postura al ver a Weasley, este cambio su rostro arrogante.
—Que pasa Weasley, ¿estas cansado de no hacer nada en clase de Herbologia? Aunque bueno, no me sorprende, con tu varita es imposible hacer algo, haste un favor y consigue otra—Esto Provocó que la mesa de las serpientes estallará en burlas.
Weasley se había puesto rojo de la vergüenza, aunque esa vergüenza se transformó en ira.
&No creo que puedo permitirse otra_Hablo Matheo quien desde su lugar se burlaba de el.
—¡Ese no es asunto tuyo, Malfoy!—Espeto con rabia.
—¿Que acaso no tienes otra cosa más que hacer que no sea jodernos la vida a todos?—La mesa de Griffyndor veía a nosotros las serpientes con odio mientras susurraban cosas.
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El amor prohibido de los Herederos.
FantasiAriana Grindelwald, una bruja de la alta sociedad que intenta vivir con la presión de ser hija y nieta de dos magos extraordinarios. Ella tártara de demostrar que es digna de poseer dos grandes y poderosos apellidos. A medida que crece y conoce a un...