capítulo 7

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*Frank*

Todo fue tan rápido que me cuesta trabajo asimilar lo que ocurrió...
Gerard Way, el chico sexy de los ojos gloriosamente verdes, me acaba de dar sexo oral y no fue cualquier sexo oral, fue el mejor que me hayan dado.
Estoy un poco nervioso por lo que vaya a pasar después cuando de repente siento la mano de Gerard sobre mi pecho, lo acaricia suavemente mientras mi respiración vuelve a su ritmo normal.

— No te preocupes, si aun no estas listo no lo haremos, no quiero que me veas como un abusador —suelta una risita por lo bajo— aunque no debería ser piadoso, estas que te pudres de bueno —muerde su labio y me mira de una manera tan sexy que no puedo resistirlo más y me aviento encima de él para besarlo apasionadamente.

Nos besamos por unos cuantos minutos, nos separamos un poco para tomar aire y nos recostamos uno junto al otro.

— Frank...—dice tranquilo.

— ¿Si? —contesto en un suspiro.

— ¿Me puedo quedar aqui contigo?— voltea a verme esperando mi respuesta.

— ¡Claro! —no lo dudo ni un segundo, mis ojos obtienen brillo instantáneamente.

Él sonrie como niño pequeño y me abraza muy fuerte,su abrazo es tan cálido, el momento tan hermoso y cómodo que ni siquiera me doy cuenta de cuando me quedo profundamente dormido en sus brazos.

*

Al despertar ya no esta a mi lado y ya empiezo a creer que solo ha sido un sueño, un muy excitante sueño, hasta que lo veo entrar al cuarto con una toalla enredada en la cintura, acaba de tomar una ducha. Me mira con ternura y se acercó para darme un beso rápido en los labios.

— Buenos días, guapo —dice bajito y debo admitir que me hace sonrojar con sus palabras.

—Buenos días —digo un poco adormilado aun.

— Debo ir al trabajo, a la disquera que esta a tres calles de la librería donde tú trabajas...—dice tomando su ropa del baño.

— ¿Enserio trabajas ahí? —pregunto inquieto.

— Si, bueno disimulo que lo hago, en realidad es de mi padre asi que le ayudo a veces —sale del baño con la mitad de su ropa ya puesta.

— Que bien y ¿quieres desayunar?— Solo pregunto por educación porque aunque yo no acostumbre desayunar hay personas que si lo hacen.

— No, gracias, no suelo desayunar pero un café no me vendria nada mal—me guiña el ojo.

— Bueno entonces me ducho y vamos por uno, te acompaño a tu trabajo y de ahi me voy al mio, ¿te parece? —digo levantandome de la cama.

— ¡Perfecto! Así te puedo ver un poco más —Se acerca a mi con una sonrisa tierna y me besa lentamente, un beso muy romántico a decir verdad.

"Cielos, Gerard de verdad me vuelve loco"

Podría quedarme así para toda la vida pero lamentablemente necesito trabajar para poder seguir comiendo y así Gerard no tendrá un novio anoréxico.  Bueno aunque realmente no somos novios aún pero seria muy lindo que así fuera.


My Hopeless Romance© «Frerard»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora