Jade Miller siempre había soñado con ser una bioquímica exitosa, capaz de descubrir curas para las enfermedades más mortales. Pero su sueño se convirtió en una pesadilla cuando fue secuestrada por Emir Bianchi, un poderoso y peligroso mafioso italia...
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Lorenzo
Veo a Emir caminando de un lado a otro de la oficina gritándole a través del celular a no se quien, han pasado tres semanas desde que Luigi y Jade desaparecieron, vuelvo a clavar la vista a mi computadora en espera de una señal del rastreador de Luigi, Pero es en vano, él sabía de su existencia es obvio que lo retiraría de su cuerpo.
Me cubro el rostro cuando las lágrimas comienzan a salir, han sido tres semanas sin saber nada del amor de mi vida, es cómo si la tierra se los hubiera tragado, y todo por mi maldita cobardía, si tan solo hubiera hablado. No estaría aquí lamentándome como un maldito idiota.
-Puedes creerlo a esos hijos de puta nadie los ha visto - Emir habla y levanto el rostro para verlo - ¿Por qué estás llorando?
-Emir dime ¿Cuál es la verdadera razón por la que los estás buscando? - lo enfrentó poniéndome de pie - ¿De verdad piensas matarlos?
-Matare a Luigi - sentencia molesto - y a Jade... para ella tengo planeado un final diferente
- ¿Te estas escuchando? - lo miro confundido - Estás hablando de tu mejor amigo y la única persona que logro sacar tu mejor personalidad
- No se de qué personalidad hablas - se hace el loco - ¿Además tú qué tanto los defiendes? No me digas que Jade hizo un trío contigo y Luigi
- Eres un completo imbécil - lo empujó molesto - Esa mujer te ama como no tienes una idea, te eligió a ti por encima de todos y tú no dejas de tildarla como una zorra, Jade no se merece eso, tú no la mereces
- ¡JADE DURMIO CON LUIGI! - me grita dejando ver la vena marcada de su cuello - es una zorra y te prohíbo que la vuelvas a defender o mencionarla en mi presencia
- También durmió conmigo y eso no la hace una zorra - una lágrima traicionera baja por mi mejilla, Emir da un paso atrás incrédulo - La hace una mujer inteligente por pedir ayuda cuando está pasando un mal momento
- Lorenzo no puedo creer eso de ti - jala su cabello furioso - ¡Eres mi primo y te metiste con mi mujer!
- ¡DEJA DE PENSAR ESTUPIDECES, QUE CON LA ÚNICA PERSONA QUE ME HE METIDO ES CON LUIGI! - Grito sin pensar, preso de la irá - Y por tu maldita culpa estoy lejos del amor de mi vida.
-¿De qué estás hablando? - está pasmado, no se mueve parece un idiota, mientras que las lágrimas salen y recorren mis mejillas sin detenerse
- Jade nunca te engaño con Luigi - me sincero sintiendo como mi cuerpo se libera del peso que ha estado cargando por años - Luigi y yo somos parejas o bueno al menos lo éramos hasta ese maldito día
Emir patea la silla que tiene enfrente y sale de la oficina echo una fiera, no se a donde va ni me interesa, enciendo mi celular detallando mi fondo de pantalla, la radiante sonrisa de Luigi opaca el paisaje que tiene atrás, aunque las cataratas del Iguazú son hermosas, Luigi era quien en realidad se robaba mi atención, fue nuestro primer viaje juntos decidí llevarlo a él y su familia de viaje como regalo de cumpleaños, nunca lo había visto tan feliz.
Cierro los ojos y la última mirada de Luigi resuena en mi cabeza, me hace temblar el hecho de saber que por mi culpa sus ojos perdieron el brillo que tanto lo caracterizaban, siempre he sido un idiota, pero Luigi siempre me perdonaba y el saber que está vez la decepción fue tanta como para terminar me da entender que ya no hay vuelta atrás.
