Pasión prohibida ' ˢᵃᵗᶻᵘ ᴳⁱᵖ '

TRUE: Abu

Tzuyu pov

Nos quedamos en casa de Momo en lo que Sana y yo limpiabamos la casa.

Según Momo y Dahyun se encargaron de limpiar la casa, pero aún así quisimos limpiarla y despolvar algunas que otras cosas. En lo que esperamos de que llegué nuestras cosas como ser nuestras camas; electrodomésticos...

Cuando entré a casa de Sana no pude evitar llorar.

Estaba barriendo su sala y ella limpiaba las ventanas. Recordé todo ése tiempo.

Recordé a mamá, admito que aún la extraño.

Extraño a mamá a pesar de que según ella quería lo mejor para mí aún que eso signifique que me haya alejado de Sana.

Quizás si mamá hubiera aceptado mi relación con Sana las cosas hubieran sido diferentes. Pero nadie, ni yo, la extraña más que mi madre Jeongyeon.

Sana vio que estaba llorando en silencio por lo que inmediatamente fue hacía mí y sin preguntar ni nada simplemente me abrazó, yo lloré en su pecho. Abrazándola y aferrándome a ella como si me la fuesen a arrebatar.

jaló mí muñeca e hizo que fuéramos a sentarnos en su sofá que estaba envuelto con una sabana.

-Bebé.- me tomó del mentón e hizo que la viera. Mis ojos llenos de lagrimas. Ella los secó con su pulgar y sus ojitos de ella decía "Estoy aquí, Tzuyu".

No tenía palabras para poder soltar todo lo que tenía simplemente volví a llorar. Pero lloraba por aquel maldito año en el que no la dejé hablar a Sana.

No podía gesticular ninguna palabra simplemente lloraba y lloraba el hecho de tener que aceptar que Sana estaba sola con mi hijo.

-Pe- perdón.

Apenas y podía hablar. Ella me abrazó y yo la abracé acariciando su cabello. Es difícil para mí el tener que aceptar dos realidades; el que Sana haya estado sola por más que haya tenido una pareja junto a ella y el hecho de que mamá se haya quitado la vida.

-Bebé, mi amor... no tienes porqué pedir perdón.

-Sí, sí debo. Perdóname por no escucharte esa noche. Estuviste sola mi amor, eso no puedo perdonarme.

-No amor, no estuve sola. Jamas estuve sola, mi hermana estuvo dándome consejos y estuvo conmigo para lo que sea.

-Pero no puedo evitar aceptarlo que yo no haya estado contigo. Quizás sí...

-No amor, era lo mejor. Quizás si te hubieras escapado conmigo las cosas hubieran sido difíciles para nosotras. Tu mamá no hubiera descansado hasta encontrarte y traerte de nuevo a Japón o a Corea y quizás de mí jamás hubieras sabido.

-¡No!, no me importa si mi mamá me hubiera buscado, yo hubiera estado feliz a tu lado, con mi hijo creciendo en tu vientre y viéndolo crecer.

-Créeme amor. Lo mejor era y siempre será que tú y yo nos hayamos alejado. De lo contrario...

--De lo contrario, qué?.

-De lo contrario yo ya no existiría más en este mundo.

-¡Mamá!, mira lo que encontré jajajajaja que bonito.

Evan llegó emocionado hacia nosotras e hizo que volviera a la realidad, una dulce realidad.

-Mami, ¿Por qué mamá está llorando?- quitó su sonrisa de a poco al verme llorar.

Él se acercó y limpió mis mejillas con la manga larga que tenía puesta.

-Mamá, no llores. Te amo mamá, por favor no llores. Estás muy bonita para llorar.