¿Quién Eres?

214 22 4
                                    

Hola, bueno les comunico que solo quedan tres capítulos (a parte de este) para que esta historia termine ☺️ así que bueno, espero le sigan demostrando amor, tanto a la historias como a la mortal que intenta escribir sobre esta pareja que tanto le gusta ja, ja, ja xD y bueno... Sin más me retiro y espero sus comentarios ♥️❤️🥰

Conforme avanzaban las horas, Karlie se quedó dormida esperando a que la rubia despertará, Harry le había dicho que probablemente no lo haría, sino hasta el día siguiente, aun así, no la dejó sola, la rubia durmió toda la noche, y cuando al día siguiente la rubia abrió sus ojos, estaba sorprendida.

— ¿Descansaste?
— ¡¿Pero qué?! – Gritó.
— ¿Estás bien? – La observó.
— ¡¿Q-quién eres?! – Se sorprendió.
— Vamos Taylor estás bromeando ¿no?
— ¿Te conozco?

Karlie observó la confusión en los ojos azules de Taylor, estaba sorprendida y algo temerosa, la vio revisar debajo de la sábana para cerciorarse que estuviera vestida.

— Es absurdo que lo hagas, no hay nada debajo de la ropa que no conozca – Gruñó.
— ¡¿Qué?! Pero yo no... Yo...
— ¿No te van las chicas? – Sonrió – Eso no decías mientras gemías mi nombre.
— ¡¿Qué?! – Gritó.
— Escucha, sé que has pasado muchas cosas, pero tiene que revisarte Harry.
— ¿Harry?
— ¿Qué es lo último que recuerdas?
— Bueno, tengo cosas que hacer en la empresa, tendremos una junta por la salud que se deteriora del dueño – Suspiró.
— Ya veo ¿recuerdas tu marca?
— ¿Mi marca? Oh – Frotó su cuello – Fue hace ya tiempo, claro.

Harry arribó, la chica ojiazul lo observó, el joven la revisó y se dio cuenta que prácticamente recordaba todo, excepto a Karlie y lo relacionado con ella, es decir a Harry, Annie, el tiempo con la chica y todo eso, Karlie mordió su labio y se retiró del apartamento de la rubia con la excusa de estar cansada y tener cosas que hacer.

— ¿Está bien tu novia? – Preguntó Sophie.
— Que te importa – Gruñó.
— Solo quería ser amable.
— No me interesa tu falsa amabilidad, gracias.
— Como digas, ven, te está esperando.

Karlie entró a la habitación de David Harris, por su parte Taylor estaba sorprendida por lo que el moreno le contaba, pero no recordaba a esa castaña, incluso creía haberla visto en la empresa.

— Creo que sería mejor si descansas un par de días.
— Pero...
— Quisiera tener un seguimiento de como reaccionas, de si te sigues sintiendo mal o todo está mejor.
— Gracias, creo que si me quedaré en casa – Frotó su sien.
— ¿Te duele?
— Me siento mareada, y algunas punzadas cuando intento recordar algo sobre...
— Tranquila, deja que solos lleguen, no te presiones.
— Gracias.

La rubia se quedó en casa, observó que tenía ropa que no era suya, el tamaño era diferente y se sonrojó al pensar en las palabras de aquella castaña, los siguientes días se quedó en casa, llamó a Emily y le dijo que estaba indispuesta y cuando apareció la chica le sonrió.

— ¿Se siente mejor señorita Swift?
— Claro Emily, gracias – Sonrió.
— Me da gusto – Se encogió de hombros.
— ¿Qué pasa Emily?
— Sé que me dijo que me tomo muchas libertades, pero lo del otro día ¿está bien? – Preguntó.
— ¿El otro día? – La observó.
— Si, la señorita Harris y la señorita Kloss.

La rubia se tensó al escuchar de nuevo ese nombre, Karlie Kloss, siempre salía a relucir el nombre.

— ¿Qué hay de ello?
— ¿Es verdad lo que dijo la señorita Harris? De que tiene una relación con la señorita Kloss.
— No, no es verdad, yo ni si quiera conozco a la señorita Kloss – Gruñó.
— Lo lamento.
— Está bien, solo ponte a trabajar – Gruñó.

La Marca.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora