La Partida De Karlie.

242 22 10
                                    

Harry y Annie se observaron, estaba hablando como si pudiera recordar cosas, pero no dijeron nada, solo sonrieron y dejaron que todo fluyera en ella, cuando el malestar desapareció, y tras comer se dirigieron de nuevo hacia el consultorio de Harry, esta vez le acompañaba Annie que llevaba a Taylor del brazo, la rubia fue valiente al momento en que sacaron varias muestras de sangre y después Harry y Annie la llevaron hasta su departamento, en el cual corrió para dejarse caer en la cama y dormir, sus sueños estaban como siempre plagados de Karlie, esta vez ya no quiso pelear con su cerebro, aceptaría que todo viniera cuando quisiera y no se enojaría por no recordar.

— ¿Está bien, señorita Swift? – Preguntó Emily.
— Me he estado sintiendo mal, pero gracias por preguntar.
— ¿De nuevo su enfermedad? – Preguntó tímida.
— No – Negó – Esa afortunadamente se curó, y ahora no sé por qué sea – Suspiró.
— Debería revisarse.
— Ya lo hice – Sonrió – Me he hecho estudios y espero los resultados.
— Me alegra mucho, señorita Swift.
— Gracias por preocuparte por mi – Le sonrió.
— Si necesita algo, avíseme por favor.
— Gracias.

Taylor observaba el calendario en su escritorio, faltaban tres días para que Karlie se fuera, en eso llamaron a la puerta sacándola de sus pensamientos, tras un "adelante" la puerta se abrió y dio paso a Sophie Harris, su estómago se estrujo y de nuevo sintió nauseas, recordar que aquella mujer había casi abusado de Karlie cuando era niña y había volteado todo diciendo que había sido la castaña la que había intentado algo con ella, respiró profundamente para calmar su enojo pero fue un error, solo sintió más asco y nauseas.

— ¿Estás bien? – Preguntó Sophie – Te ves pálida.
— Yo... Sí... Solo comí algo que me hizo daño y tengo nauseas solo de recordarlo – Clavo sus ojos azules en ella.
— Que lastima, entonces no podrás ir a celebrar con nosotros – Se sentó frente a ella – Tengo todo listo, así que firma – Le tendió la documentación.
— ¿Qué es? – La tomó y comenzó a leer lo que la chica le tendió.
— Se está anunciando de la renuncia de Karlie Kloss a la empresa, y se hace notificación de que pasa a ser la nueva dueña de todo – Se recargó y cruzó la pierna.
— ¡¿Qué?! – Se sorprendió Taylor y la observó.
— ¿Te arrepientes ahora de quitar la marca? Puedo hacértela de nuevo, si quieres – Sonrió.
— ¡Pero por supuesto que no! – Gruñó molesta mientras leía.
— ¿Qué te sorprende tanto, Swift? ¿Saber que ahora que recapacitó y aceptó nuestra ayuda la estamos reconociendo como una nuestra? – Sonrió.
— No, me sorprende que vayan a devolver lo que robaron – Gruñó.
— ¿Pero quién diablos te crees? – Bramo molesta.
— Vamos Sophie, ¿en verdad crees que me trago el cuento de que ustedes son unos seres de luz que van por la vida queriendo ayudar al mundo? – Gruño seria – Sé quiénes son, sé que le hicieron a Karlie – Se inclinó sobre el escritorio – Sobre todo, sé que hiciste con ella siendo una niña y me das asco – Literalmente, pensó Taylor.
— ¿Y qué le hice según tú? ¿Karlie te dijo eso? Por qué lo dudo.
— No importa como lo sé, solo lo sé.
— Bueno, si fuera cierto lo que dices... – Llamaron a la puerta – Adelante, Karlie – Sonrió.
— Sophie, por favor déjame firmar y vámonos de aquí – Pidió.
— Claro, cariño – Sonrió.

El cuerpo de Taylor de nuevo tuvo esa sensación, pero suspiró de nuevo tratando de calmarse y su estómago gratamente dejo de sentirse revuelto y asqueado, la vio inclinarse para tomar los documentos y firmarlos sin ponerse si quiera a revisar que decían.

— ¿Los firmas sin leer? – Gruñó Taylor.
— ¿Los leíste tú? – Preguntó sin levantar la vista.
— Si, pero...
— ¿Dicen que mate a alguien?
— No, pero...
— Da igual entonces – Terminó de firmar – Gracias por... Bueno, ya sabes, me tengo que ir – Se giró para caminar a la puerta.
— Espera – Llamó Sophie.
— ¿Qué? – Gruñó.
— Me iré contigo, Taylor duda que seamos buenas personas y que tú y yo nos llevemos bien.

La Marca.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora