La Marca.

La Renuncia de Cara y Karlie.

Yo estaba pensando en subir ya toda la historia, pero luego me quedé que aún no termino el epílogo y es por qué no me gusta como queda xD y no por qué no sepa xD sigo batallando con que no me gusta como queda y espero que les guste a ustedes como va y sigan dándole amor la historia y obvio les agradezco infinitamente sus comentarios sobre mi ♥️ me hace feliz que aún haya personitas que sigan amando este ship tengo como yo, mil gracias por todo ♥️

Apretaba su cabeza fuertemente, acababa de decir el nombre de esa chica, sin verla, pero había dicho su nombre, o bueno un diminutivo cariñoso, había estado haciendo la cena, y sobre todo le había dicho "amor" y que le encantaba ser de ella, quería gritar y llorar, mordió su labio y sintió como le agarraron el hombro.

— Respira Taylor, todo estará bien.
— N-no lo está, no la recuerdo, sin embargo, parece que mi cuerpo si – Apretó sus ojos.
— Tranquila, te daré algo para controlar la jaqueca ¿sí?
— Gra-gracias – Jadeó.
— Bien, llámame si necesitas algo, tienes mi número – Sonrió.
— Gra-Gracias – Asintió.

Taylor salió del consultorio de Harry, se dirigió hacía su apartamento, apenas abrió la puerta y se dejó caer en el sofá más cercano, se sentía cansada mentalmente, el tratar de recordar a alguien que todo te decía que habían estado juntas y no poder recordar era frustrante, unos días más pasaron cuando el timbre sonó, se levantó y caminó hasta la puerta.

— Hola amor – Saludaron.
— Hola mamá – Le sonrió.
— Hola tía, Taylor – Sonrió.
— Hola Dustin, Amy ¿cómo están?
— Bien, Taylor, lamento molestarte.
— No es molestia, pasen, pasen – Se hizo a un lado.

Dustin entró corriendo, era la primera vez que visitaba a su tía y se llevaría una decepción al no encontrar a quien buscaba.

— ¿Todo bien amor? – Cuestionó Andrea.
— Eh, sí, sí ¿quieren comer algo?
— Estamos bien, comimos antes de llegar aquí – Sonrió Amy – Dustin tenía mucha hambre.
— Bien – Asintió.
— ¡Tía! – Llamó Dustin – ¿Y Karlie? ¿Dónde está Karlie?
— ¿Karlie? – Lo observó.
— Si tía – Rio – Karlie, tu novia – Sonrió.
— Bueno ella... Yo...

¿Su novia? ¿Su familia la conocía? ¡¿Qué diablos pasaba?! Quería poder recordar todo y no podía, sentía que algo le faltaba en la vida y a la vez tenía miedo.

— ¿Todo bien cariño? – Preguntó Andrea.
— S-si – Asintió.
— ¿No me digas que ella y tu terminaron por culpa de mamá? – Preguntó preocupada.
— ¡NO! – Gritó – Yo... Bueno...
— ¿Ya no estás con Karlie? – Preguntó Dustin preocupado.
— Tranquilo, ella está en su casa, ella vive allá – Le sonrió – Así que tranquilo.
— ¿Puedes llamarla? – Pidió suplicante.
— S-sí, seguro.

Tomó su móvil y buscó el contacto de aquella chica, tembló de solo pensar en llamarla y escuchar su voz, así que marcó y de inmediato lo pasó a Dustin con una sonrisa.

— Hola ¿Qué pasa directora Swift? – Escucharon.
— Hola Karlie, soy Dustin – Sonrió.
— ¡Hey campeón! ¿Cómo estás? – Su voz sonó diferente.
— Vine a casa de tía Taylor a buscarte, pero dice que no vives con ella, así que le pedí llamarte.
— Está bien, no pasa nada, me habría gustado mucho verte – Suspiró.
— ¿Puedes venir a casa de la tía?
— Yo...
— Vamos, Karlie, vinimos a verte – Sonrió Andrea.
— Es que no quiero incomodar – Andrea observó a su hija – ¿Puedo ir?
— C-claro – Expresó Taylor nerviosa.
— Entonces voy para allá – Colgó.

Tras unos minutos el timbre sonrió y Andrea se adelantó a abrir, Karlie le sonrió y le dio un suave abrazo, pero Dustin corrió hasta ella y la abrazó haciendo que Taylor los observara, la chica no hizo amago de querer entrar o algo.