"Quizás debería aceptar que ya fue, que no fuimos, no somos y no vamos a ser " -Leah Amara Stilinski
Leah Amara Stilinski, una joven de 15 años, quién estuvo enamorada del joven McCall desde muy pequeña, pero a pesar de todo estuvo para el en sus m...
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Los chicos se fueron, no muy convencidos de lo que habíamos descubierto, pero sabía que ellos pronto lo recordarían, recordarían a Stiles.
Estaba en la veterinaria con Deaton, pero me aburrí de no hacer nada así que decidí ir a la preparatoria con los chicos para ver qué hacian.
Los encontré en la biblioteca buscando que es un "Stiles".
—No creo que sea el Stiles que buscamos —Dijo Lydia.
Llegue a su lado y estos me miraron, mientras miraba la computadora.
—Ya les dije que Stiles es mi hermano — repetí de nuevo — no se para que buscan.
—Queriamos sersiorarnos — Dijo Scott y me senté a su lado.
—¿Y Malia? — pregunté.
—Tiene exámenes de recuperación — me dijo la pelirroja.
Los chicos cerraron la computadora, y los tres nos miramos fijamente al escuchar un aullido de coyote, era Malia.
—Creo que el examen no salió muy bien — les dije a los chicos riendo.
A Malia le costaba controlarse, después de todo Stiles era como su ancla, al olvidarlo olvidó como mantenerse en control.
Los tres nos levantamos y fuimos en busca de la castaña, pues no estaría muy bien.
En el camino nos encontramos con la madre de Lydia y mi padre, al parecer lo habían llamado.
Al verlo no pude evitar querer abrazarlo, pero me contenía, al igual que contenía las lágrimas que amenazaban por salir.
—Malia, estás a salvo — dijo Scott intentando llegar al coyote.
Este gruñía y sus ojos estaban azules, Papá, Lydia, su madre y yo mirabamos desde atrás, pero veía como ambos adultos me miraban, pues se les hacía extraño que estuviera aquí, después de todo no me conocían.
—No te voy a lastimar — le dijo Scott y nos acercamos un poco a ella — Ya se está calmando.
—Tal vez debas gruñir también — le dijo Noah a Scott, pues Malia no se veía calmada. — Scott, eres el alfa, ¿No puedes hacer que sea un poco más dosil?.
—En un momento cualquiera podría hacerlo — dije y todos voltearon a verme — pero este es su territorio, Malia venía aquí antes de la cabaña del lago — les expliqué, sus vistas no se despegaban de mi — Malia solo protege su territorio, debemos irnos de aquí.
Todos asintieron y retrocedimos un poco, para que así la castaña se calmara un poco.
—Malia venía aquí a superar las lunas llenas — Dijo Lydia recordando — luego empezamos a ir a la casa del lago.
—Creía que había un animal salvaje en esa casa — Dijo su madre enojada.
—Mejor agradece que no te lo digo todo — le dijo Lydia a su madre.
