Epílogo I

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Holaaaa! Las extrañaba 😊

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Holaaaa! Las extrañaba 😊. Recuerden que esta historia tendrá dos epílogos, este es el primero y es narrado por Aby. Nos leemos pronto con el de Christian. Entre tanto, voten, comenten un montón y recomienden la historia. Para las que me preguntan por el adelanto del libro de Diana, lo van a encontrar en Ko-fi. En mi perfil de aquí, (Wattpad) está el link, también en IG. 

Les amo, extraño leer sus comentarios. Disfruten mucho de este epílogo hecho con mucho amors.

Epílogo

✨Abril✨

Tenía muchas miradas sobre mí, la sensación de ser observada me acompañó mientras me movía con prisa por las graderías, buscando a mis amigas en el sitio que acordamos. Se me había hecho tarde por culpa del trabajo. Una reunión de última hora con una novia difícil provocó que fuese imposible llegar a tiempo a la exhibición, como le prometí a Christian. Avancé entre las personas, correspondiendo las sonrisas que me ofrecían, preguntándome si él se había percatado de mi ausencia.

—¡Aby!

La voz de Diana sonó por encima del ruidoso sonido de los motores que rugían en la pista. Deslicé la mirada por la zona, hasta que observé tres brazos levantados al aire, haciendo gestos para llamarme.

El alivio de hallarlas me hizo suspirar, descendí varios escalones, percatándome de uno que otro teléfono que me apuntaba, de los susurros y de las sonrisas amistosas que me dedicaban. Ser la novia de Christian me puso en el foco de atención, algo con lo que lidiaba bien, o al menos, así lo sentía. Después de que las fotos de nuestro momento en el podio, en la final de la temporada pasada, se volvieran virales, me adapté al interés demostraban por nuestra relación, a asistir a eventos tomada de su mano, y a ver mi cara y la de Nala en sitios webs.

—¿Qué te pasó?

—Una novia complicada —le respondí a Maia, tras saludarla.

Diana estaba centrada en la pista, aun así, se puso de pie para saludarme con un beso en la mejilla, para luego hacerme un hueco entre ella y Mich, en donde me senté, sin ocultar mi agotamiento.

—Se supone que delegaste obligaciones en la tienda para no cargarte de estrés, y ahora mismo luces estresada.

—Ninguna de mis propuestas la convenció. Me quedé con ella escuchando algunas ideas. Estoy estresada porque sabía que era tarde. ¿Ya salió Chris a la pista?

—Aby, eres la mejor en lo que haces. La tipa debe ser una idiota.

La intervención de Mich en mi conversación con Maia, me tomó por sorpresa, porque parecía estar atenta a su teléfono y a nosotras. Recosté la cabeza sobre su hombro, cansada por la carrera contra el reloj con la que lidié para estar ahí, mientras Maia asentía a la afirmación de nuestra amiga.

Mi carga de trabajo en la tienda disminuyó como me lo propuse. No había sentimiento de culpa por ello, estaba disfrutando de esa etapa en la que me encontraba volcada en el diseño de la decoración de cada evento, solo haciéndome cargo de asuntos de vital importancia en la administración, cubriendo bodas únicamente cuando era estrictamente necesario, para poder acompañar a Christian en cada carrera.

Fuimos momentosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora