Abril siempre ha estado enamorada de Franco, por eso cuanto este le propone fingir una relación decide aprovechar la oportunidad para conquistarlo. Lo que Abril no esperó fue que el arrogante y apuesto rival de su novio falso, se interpusiera en su...
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✨Abril✨
15/2. Frenesí
El siguiente capítulo posee contenido 🔞 si no te gusta leer este tipo de capítulos te recomiendo ignorarlo, pero como sé que les encanta aquí se los dejo JAJAJAAJJAJAAJAJAJAJA
La gorra de Christian olía a él, no importaba cuanto de mi perfume le hubiera puesto, su aroma permanecía en ella, por ello, tenerla sobre mi cabeza me hacía sentirlo cerca. Agradecí que mi nariz encontrase tan agradable su olor, porque fue la única forma en la que, el que desprendían la gasolina y los neumáticos calientes, no me perturbaron.
A decir verdad, no me encontraba tan inquieta a como pensé. La parte más difícil había sido llegar al box, recorrer toda la zona llena de motores ruidosos, y el ambiente tan fuerte que se respiraba. La energía era densa en aquel sitio, por el estrés y las emociones de cada piloto. Dentro del box me sentí más tranquila, estaba lejos de las miradas, porque nadie del equipo de Christian actuó con sorpresa ante mi presencia. Tomé asiento en un rincón, justo al lado de su jefe de prensa, el que se presentó solo, puesto Christian lo ignoró cuando entró.
Desde ese punto pude observar a todos. A los mecánicos conversando con Christian minutos antes de que se marchara, a los ingenieros de pista atentos a lo que pasaba a través de computadoras y el movimiento de todos que actuaban en función del piloto malencarado que se preparó manteniéndose concentrado. Me comporté como una espectadora silenciosa, oculta tras la gorra y un par de lentes de sol.
En el único momento en el que me sentí ligeramente expuesta, fue cuando Christian se acercó. Le deseé suerte en voz baja y le pedí que fuera cuidadoso, él no aceptó, pero sonrió cuando le hablé de mi intención de llevarle una pulsera de protección. Había mucha envidia a su alrededor, se lo comenté y él me informó que se había lavado las manos con sal antes de salir del motorhome.
—¿Estás saliendo con Christian? —preguntó Abel, el señor que tenía al lado. Su cuestionamiento llegó cuando me encontraba concentrada en la pantalla frente a nosotros desde donde observaba a los pilotos listos para salir.
—Sí —respondí a secas, aunque no estaba segura si era cierta mi afirmación.
Christian era el poleman, se encontraba a la cabeza, aguardando la salida con su cuerpo ya en posición. El grito de la tribuna llegó hasta ese lugar en el momento en el que se marcó la salida, los motores rugieron y dentro del box todos se quedaron atentos a la pantalla.
Mi corazón latió con fuerza una y otra vez, mientras Christian avanzaba por el circuito, dominando cada curva y manteniendo su posición privilegiada. No pude continuar viendo la pantalla, para distraerme me centré en la actitud de todos. Javi se hallaba tenso, el jefe de prensa entretenido con el teléfono, el equipo atento a lo que pasaba. Cuando no pude huir más de mis miedos, me desconecté de lo que vivía, cerré los ojos y eché la cabeza hacia atrás, arrepentida por estar ahí. Me encontraba convencida de que pude haberlo manejado mejor arriba, con mis amigas.
