Amor y mezcal

Epílogo

3ª parte

Martha me envió capturas de pantalla de msj donde Sofía le hacía creer que ella y yo teníamos una relación, había también fotos juntas, que son falsas, son montajes porque yo nunca me he tomado fotos con ella. Escuché también audios donde le decía que ella me daba todo el placer que Martha ya no podía, que por eso llegaba tan tarde a casa por estar con ella, es una maldita mentirosa!!!

También le mando audios diciéndole que yo la amaba, que nos amábamos y queríamos estar juntas que dejara de hacer el ridículo y se largará de mi vida, que ella sería una mejor madre para nuestros hijos. Qué mierda había hecho Sofía frente a mis narices?

Caí de rodillas llorando, ella me miró y quiso levantarme y consolarme. Pude ver en sus ojos que le dolía verme así, pero negó con la cabeza y se alejo, entonces solté un grito desgarrador y negué toda esa mentira que tejió esa maldita arpía.

C- No es cierto mi amor, te lo juro por nuestros hijos que no es cierto, jamás te engañaría, nunca he dejado de amarte, tu eres mi vida entera, si tú no estás a mi lado me muero
M- Yo...
C- Esto es una mentira yo no estoy con ella, si he ido a su casa pero por qué según ella a veces olvida algunos documentos o a veces la paso a dejar en la noche pero solo eso, yo nunca, te lo juro jamás te haría algo así, antes de hacerte daño a ti me lo hago a mi!
M- No, no, no puedo creerte, no más!

Me levanté y tome entre mis manos su carita enrojecida por el llanto y la obligue a mirarme a los ojos.

C- Mi amor, mírame, de verdad me crees capaz de engañarte, de serte infiel? Porque yo no soportaría que otras manos me toquen, no podría soportar que otro cuerpo que no sea el tuyo se funda con el mío, Martha mi amor solo tú tienes permitido tocarme y hacerme el amor, nadie más, solo tu me conoces de los pies a la cabeza... Yo no sé porque piensa esa maldita que yo pondría mis ojos en ella, pero te juro por mi vida que nunca le he dado motivos para pensar así y mucho menos he tenido nada con ella.
M- Por favor ya no quiero sufrir más! Solo firma y déjame ya!

Tomé su mano y la puse directamente en mi pecho, mi corazón latía a mil por hora.

C- Lo sientes? Este corazón solo late por ti mi amor, nunca nadie ocupará tu lugar. Mi amor yo solo tengo ojos para ti, mi cuerpo, mi alma, mi corazón y todo de mi te pertenecen solo a ti, hoy, mañana y siempre.

Cayó de rodillas y me abrazo de las piernas y lloro, lloro como niña pequeña, nunca la había visto así, me destrozó el alma verla sufrir en gran parte por mi culpa.

M- Te amo Celia, te amo con todo mi ser bonita, eres mi vida entera y no quiero perderte! Por favor no me dejes, déjame enamorarte una vez más! Dime qué hago para que me ames nuevamente?
C- Mi amor pero si yo te amo a ti y no te permito que me dejes, somos Marcelia, juntas por siempre lo recuerdas?
M- De verdad aún me amas?
C- Sí mi amor y vor a demostrarte cuanto!

La acompañe a nuestra habitación y le pedí que me esperara ahí, fui al jardín y le pedí a Fer que llevara a los niños con su tía Piedad, más tarde iría por ellos. Ellos no protestaron solo saltaron felices y salieron con su niñera, sabía que ellos escucharon, Fer seguramente algo les explico.

Cuando fui al encuentro con mi mujer, la encontré en nuestra cama, en posición fetal, abrazada a nuestra foto familiar, estaba llorando y a mí me partía el alma verla así. Esa maldita pagaría el daño que nos estaba haciendo, especialmente a mi mujer, pagaría con sangre el haber intentado separarnos.

C- Mi amor
M- Celia, qué hice mal?
C- No mi amor tu no has hecho nada mal, fui yo la que confío en ella, la que pensó que era una buena persona y permití que se metiera en nuestra vida.
M- Pensé que te cansaste de mi, que ya no te soy suficiente...
C- No amor, eso jamás
M- Pensé... Pensé que ahora que estoy más vieja tu querías a alguien como tú, joven, atractiva, que pueda estar a tu altura, a tu ritmo...
C- No! Mi amor tú eres perfecta para mí, me enamoré de ti sin importarme nada, ni tu edad, ni que ambas somos mujeres, amor no me importa que seas mayor que yo, sabes perfectamente que eso me prende muchísimo y no estás vieja, estás madurita! Cómo me gusta!!
M- Aún puedo excitarte, aún sientes deseo de hacer el amor conmigo?
C- Qué pregunta es esa? Por supuesto que sí mi amor, me excitas, me prendes y obviamente deseo hacer el amor contigo, siempre. Solo que el trabajo me consume más de lo que quisiera, pero te aseguro que tú me sigues excitando como la primera vez.
M- Te amo bonita, te amo más que a mi vida!