Fichaje de millones|KIVI

De escapada

El viernes por la tarde, Chiara llegó al aeropuerto de Granada donde quedó con una empresa de vehículos que le dejaría alquilar un coche durante aquellos días que pasaría con Violeta. Había acordado con la pelirroja pasar a buscarle ya que para ir al pueblo de Denna, había que pasar por el de la periodista antes. Al cabo de media hora, llegó hacia la dirección que Violeta le mandó y aparcó el coche detrás de una casa bastante mona y agradable.

-Estoy fuera

-¿ya? vooy

Chiara se bajó del coche aprovechando que apenas había nadie a esas horas de la tarde y se quedó apoyada en el capó mientras avisaba a Ruslana y Denna de que ya estaba en Granada. A los pocos segundos, la puerta de la casa se abrió y Chiara fijó su mirada en ella pensando ver a Violeta salir. Sin embargo, se encontró con un rostro parecido al suyo que le miraba boquiabierta.

-Ehhh, hola- dijo Tana totalmente estática.

-Oh Tana, pensaba que eras tu hermana.

-Eh no que va ojala, osea a ver, que no soy pero.... VIOLETA- llamó nerviosa a su hermana.

-¿Qué pasa?- dijo Juan Carlos apareciendo en la puerta.

-Buenas tardes - dijo la morena sonriendo.

-Tu eres...- intentaba decir el hombre asombrado al ver a la futbolista.

-Si, es Chiara, y ya nos ibamos- dijo la pelirroja saliendo de su casa con una maleta enorme.

-¿Cómo que os vais?¿A dónde?- preguntó su padre sin entender la situación.

-Al pueblo de Denna a pasar el finde, te llamo cuando llegue no te preocupes, avisa a mama.

-Em vale vale, un placer Chiara

-Igualmente señor Hódar- dijo la morena entrando de nuevo al coche empujada por Violeta para que se diese prisa.

La morena puso el coche en marcha y se alejaron del pueblo de Violeta poco a poco mientras la pelirroja miraba el coche alucinada.

-Oye, ¿tú crees que un descapotable ayuda a pasar desapercibidas?

-Ya que vamos a disfrutar de estos días, lo hacemos bien ¿no?

-Estás loca Chiara Oliver

-Tú si que me vuelves loca- dijo la morena guiñándole el ojo a Violeta mientras colocaba su mano en el muslo de la pelirroja.

Y así durante media hora más, ambas chicas iban cantando canciones entre risas y hablando sobre el encuentro tan atípico de Chiara con la familia de Violeta. Cuando el GPS les indico que habían llegado a su destino, la morena apagó el motor del coche y se quedaron asombradas con la vista que tenían delante de ellas. Era tan bonito o más de como se lo había descrito Denna. Al bajar del coche se encontraron con una pequeña casa situada frente a un valle que daba lugar a un increíble lago rodeado de gran vegetación verde. Y lo más importante de todo, no había nadie cerca de allí, por lo que antes de llegar, pasaron a comprar a una tienda del pueblo, medio camufladas, para coger víveres para esos días.

Bajaron el equipaje del coche y entraron en la pequeña casa con gran encanto rural. Al entrar, se toparon con un salón muy hogareño y una cocina pequeña pero bastante útil. Al fondo se encontraba el baño y dos habitaciones, donde una de ellas, tenía una terraza con vistas al valle.