Una Tía Sucia [FayeYoko G!P]

Capitulo dos

Yoko apretó los labios, evitando gemir cuando Faye deslizó sus manos por las curvas de ella, y se detuvo en la brilla de su pantalón. Desabrochó los primeros botones y lo bajó hasta apartarlo de su vista. Metió su mano dentro de sus  bragas para meter uno de sus dedos dentro de ella. Yoko se arqueó.

—Fa... — jadeó.

—Eso, di mi nombre, vamos....

—Faye... — gimoteó ella.

Un segundo dedo llegó a parar dentro de ella. Yoko gritó. Madre mía, pero qué sensación...

—Eso es, quiero oírte gritar — gruñó —Grita como cuando te masturbabas en tu habitación.

—¿Qué? — preguntó tratando de recuperar su lado coherente, ya que entre la excitación, le resultaba difícil pensar.

—¿Crees que no esté haba tus gemidos en las noches? Mmh... — gimió —Eres una niña mala.

Yoko se sonrojo, maldici ndose a si misma por haber gemido tan alto. Con tan solo recordarse así misma, retorciéndose en la cama la cama de placer la calentaba. Recordando aquel día, que se tocó así misma pensando que era Faye la que le brindan el placer máximo. Sí, había fantaseado con su tía, pero sabía en lo más profundo de su ser que Faye mi le haría el amor en sus sueños, era algo imposible.

Hasta ahora....

Un dolor la sacó de sus pensamientos, un dolor... Acompañado de un fuerte gemido. Bajó la mirada viendo como un tercer dedo de Faye terminaba por entrar en ella

—Joder estás muy estrecha. Ya quiero imaginar como será de apretado cuando entré por aquí — aumentó la velocidad en que sacaba y metía sus dedos, estimulando su clítoris con exitantes círculos. Yoko chilló —Córrete, pequeña.

Y eso fue el colmo para ella, un grito ahogado se escuchó en el silenio de la sala, su primera corrida, su primer orgasmo.