VERONICA
—Buenos días —llego al comedor en dónde me encuentro con los dos dhampire.
—Buen día mamá —responde Blakgelus.
—¿Y papá? —pregunta Alucard.
—Se está dando una ducha, en un momento viene —tomo asiento junto a Blakgelus.
—¿Ya tienen pensando qué haremos hoy? Estamos en Bucarest, hay demasiado que hacer aquí —comenta Blakgelus.
—No, la verdad no hemos decidido nada aún.
—¡Perfecto! Estuve investigando en internet y creo que podemos Monasterio Stavropoleos —comenta mi hijo menor —. Es un sitio muy histórico, lo ví por fotos y creo que es algo interesante y honestamente yo me muero por visitar.
Había olvidado por un segundo que Blakgelus es apasionado de la historia.
Quién lo hubiera dicho.
Para él todos los sitios históricos con únicos y mágicos.
—Y creo que después de ir allá podemos...
—Lo siento campeón pero tu madre y yo ya tenemos planes —Silas se hace presente en el comedor ya arreglado.
—¿Qué? —lo miro —.¿De qué planes estás hablando?
—No te lo había dicho pero...—el rey toma asiento junto a Alucard —. Hice una reservación para el mejor restaurante en Bucarest para nosotros dos.
—¿Hiciste una reservación?
—Es correcto amor —me responde —. Estaremos ocupados el día de hoy.
—Ustedes irán a su comida romántica... ¿Y nosotros? —habla Blakgelus —.¿Nos dejarán aquí?
—Ustedes pueden ir a conocer la ciudad —le responde su padre tranquilamente —. Tú ya no eres un niño pequeño y Alucard tampoco. Creo que pueden arreglárselas perfectamente bien sin nosotros por lo menos por un día. Además... creo que a tu hermano le vendrá bien el distraerse un poco para que no esté triste todo el día.
—¿Triste? —Alucard lleva la mirada hacia el oji-azul.
—Oh por favor... se nota fácilmente que echas de menos a Lizbeth. Tanto que no has dejado de escribirle desdé que llegamos a la ciudad, creo que deberías de darle un respiro de ti. No estarán separados por mucho tiempo así que deberías de dejar el drama un momento hijo.
—Silas, no lo molestes —le digo —. Es la primera vez que Alucard estará separado de Lizbeth por un tiempo, es natural que ambos se extrañen demasiado.
—Gracias por entenderme mamá —dice el primer dhampire —. Padre debería de ser más cómo tú.
—Yo solo digo que no deben de ser tan empalagosos.
—¿Y tú no eras empalagoso con mamá? —le pregunta Blakgelus a su padre.
—¿Yo? Para nada, yo si le daba su espacio.
—¿Oh si? —llamo la atención de todos —.¿Entonces por qué siempre llegabas a mi habitación por la ventana?
—¿Entrabas a la habitación de mi madre por la ventana? Papá... ¿No conocías las puertas? —Blakgelus mira divertido a su padre —.¿El gran Silas Tepes era un novio pegajoso?
—Demasiado —comento.
Alucard y Blakgelus comienzan a reír.
—No era necesario que trajeras esos recuerdos a la mesa querida —dice el inmortal.
—Yo creo que si, era demasiado necesario.
—Ya no te burles mocoso —Silas mira a nuestro hijo menor —. Estoy completamente seguro de que cuándo conozcas a alguien serás exactamente cómo yo.
—Disculpa papá, pero yo no me pienso enamorar jamás —responde el híbrido.
—Nadie puede escapar del amor.
—Yo si —sonríe.
—¿Y por qué no te quieres enamorar?
—Por que el amor te hace parecer retrasado mental.
Alucard y Silas cruzan sus brazos y miran seriamente a Blakgelus.
—¿Dije eso en voz alta? ¿Oh lo pensé? —el dhampire mira nervioso a los dos.
—Lo dijiste en un tono de voz en el que todos te oímos perfectamente —le dice Alucard.
—Ups...
Una risa de escapa de mi boca.
—Ahora dices que no te quieres enamorar, pero estoy completamente segura de que esos pensamientos cambiarán muy pronto cariño —le digo y llamo la atención del dhampire.
—No creo mamá.
—Yo si lo creo, estoy segura de que muy pronto conocerás a tu alma gemela. Solo un pequeño consejo hijo... no seas cómo tu padre.
—Si me llegó a enamorar que lo veo demasiado improbable yo te juro que nunca seré cómo él.
—¡Oigan! Los estoy escuchando ¿Lo saben?
Desvió la mirada hacia mi marido.
—Si... ¿Y?
—¿Qué tiene de malo qué sea cómo yo?
—Demasiado —respondo muy tranquila.
—Amor...
—Papá... no es personal pero enserio no quiero terminar con un plato de comida en la cara.
—Ya coman —dice el rey para luego tomar los cubiertos de la mesa —. Tenemos demasiado que hacer el día de hoy.
Me rio nuevamente y sin más todos comenzamos con el desayuno.
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Príncipe Vampiro: Resurrección
FantasyTodo ha sido paz y tranquilidad desdé la derrota del legendario cazador de vampiros Abram Van Helsing. La vida de algunos ha cambiado para mejor y una era prospera se ve en el horizonte, sin embargo la oscuridad vuelve una vez más para intentar arr...