Las vacaciones de Navidad terminaron, habían sido muy relajantes para Jungkook. Como todos los años, él y su hermana se marchaban a Cambridge, Reino Unido, con su madre y su padrastro. Sin duda era un lugar mucho más navideño que Corea, tenían paisajes repletos de nieve. A Jungkook no le entusiasmaba demasiado ir allí, ver a su madre era una alegría, ya que solo la veía de vez en cuando, pero estaba lejos de sus amigos y el fútbol.
Lo más interesante que hacia allí era ir de compras a la ciudad con Eunha, que era tan divertido como sonaba. Su hermanastro no tenía más que cinco años, y Jungkook detestaba a los niños gritones e hiperactivos. Al menos allí se desconectó del mundo.
Había acabado con notas muy buenas, el trabajo con Yoongi no resultó tan mal, les calificaron con un notable bajo, que siendo un trabajo a medias con Yoongi, era todo un logro.
Al día siguiente de haber estado Yoongi por primera vez a solas en su casa, volvieron a quedar allí y se repitió la misma historia. Jungkook se empezó a preocupar, ya que ni siquiera habían empezado, por lo que le dijo a Yoongi que la próxima vez quedaran mejor en la biblioteca. Discutían a cada segundo, pero al fin habían logrado terminarlo, y ahí algo de alivio habría podido encontrar Jungkook con el finalizar de las clases en las breves vacaciones.
Sus vacaciones fueron exactamente iguales que todos los meses del instituto, tocar con sus amigos, tomarse unas cervezas con ellos, soportar a Irene un poco más. En su casa ni siquiera ponían un árbol de navidad, su madre y él no se hacían regalos, únicamente desayunaban como reyes el día de Navidad y después cada uno con su vida.
La diferencia de aquel año con el resto es que Yoongi había tenido que soportar al novio de su madre, por ello iba menos a casa que de costumbre. El fin de año lo pasó con sus amigos en el local, donde se celebraba una fiesta. En el momento del beso, no dejó de pensar en Jungkook, y aquello lo machacó por dentro porque su primer pensamiento del año iba dirigido hacia él.
Sinceramente estaba deseando volver a clases, se convencía a si mismo que era por no soportar más momentos compartidos con su madre y su novio, pero realmente deseaba volver a verle. Durante las vacaciones había visto a Taehyung y a Hoseok, pero ni rastro de él. Supuso que se habría marchado con su familia a alguna parte.
Llegó al instituto con una amplia sonrisa, las paredes estaban repletas con la información del viaje de último año, ya habían sido elegidas la ciudad y el hotel, y les habían informado del precio. Debía ahorrar lo máximo posible en los pocos meses que quedaban para el viaje. Aquel día ni siquiera trajo su mochila, la primera semana de aquel mes, el instituto estaba lleno de alumnos universitarios que intentarían venderles sus universidades.
Los había visto otros años, les daban una larga charla sobre los beneficios que les daría estudiar en tal excelentísima universidad, las instalaciones que tenían, y sus magníficos equipos de fútbol. Esto Yoongi lo resumía como blah, blah, blah. Al menos se consolaba con perder clases.
Antes de la primera conferencia y acompañado por Taehyung y Namjoon, Jungkook se detuvo a hablar con algunos representantes de universidades, aquello se lo tenía que tomar en serio, debía escoger una universidad buena que le permitiera estudiar en las mejores condiciones y sobre todo que tuviera un buen equipo.
Conoció a Park Bogum, el representante de la mejor universidad, o al menos la que tenía el mejor equipo de fútbol. Era el capitán y la estrella del equipo, tenía todas las cualidades que Jungkook admiraba, sin duda quería llegar a ser como él en la universidad.
