Una pareja de Anomalocaris canadensis libera sus gametos y en el proceso asustan a un pequeño Naraoia que se aleja rápidamente para no ser alcanzado por el caviar de los gigantescos radiodontos.
El macho presenta varias lesiones tanto en las aletas como en uno de sus apéndices faciales, cicatrices de una vida llena de arduas cacerias y feroces contiendas contra otros de su especie incluyendo su compañera.
La hembra es una inusual individuo de coloración azulada, durante el cambrico la vista seguía desarrollándose por lo que estas mutaciones no ofrecían ventajas o desventajas.
Dado que ambos carecen de órganos reproductivos confiarán en que de sus millones de vástagos al menos unos cuantos llegaran a la adultez, sin duda la vida es buena para estos superdepredadores de los mares cambricos pero su reinado no será eterno, pequeñas criaturas con notocordio dentro de unos millones de años alcanzaran tamaños gigantescos y la era de los invertebrados marinos superdepredadores finalizara ante el reinado de los peces.
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Relatos del Fanerozoico
DiversosEl Sol esta muriendo y con el tambien lo hará la Tierra. Los oceanos se evaporaron y la vida se esta marchitando. Oculto en las montañas polares, donde las ultimas fuentes de agua liquida sobreviven, yace el aletargado Rinogrado Decápodo, el represe...