Oligoceno temprano, Norteamérica.
Han pasado 30 millones de años desde que el gran meteorito cayó del cielo. Los ancestros de Ecty una noche se levantarían y presenciarían cómo los grandes saurios, se habían ido.
Los primeros millones de años del Cenozoico fue una época mágica para los mamíferos. Casi todos los ancestros modernos ya estaban apareciendo y el mundo se asemejaba cada vez más a lo que es ahora.
Pero en esta nueva época aún había quien quería volver a imponer dominio sobre los mamíferos. Cocodrilos gigantescos, aves no voladoras sacadas directamente de una pesadilla o hasta monstruosos serpientes y lagartos gigantes era algo recurrente que solías ver en ciertos lugares del mundo. Pero a todos y cada uno de estos falsos herederos de los saurios fue cayendo en desgracia. Tarde o temprano, desaparecieron.
Y para los mamíferos, corría la misma suerte. La extinción no perdonaba a nadie.Así nos encontramos con los Multituberculados. El nombre es difícil y el grupo es poco conocido hasta para los expertos. Estos animalitos parecidos a ratas eran más antiguos que las aves. Se habían separado tan temprano de la rama de los mamíferos que eran anteriores a los marsupiales y a los placentarios. Todos poseían piezas dentales especializadas que no se encuentran en ninguna especie viva de mamífero.
Sobrevivieron a la caída del meteorito y no solo eso, tuvieron su máxima explosión de diversidad ni bien entrados en el Cenozoico. Pero todo lo que sube tiene que bajar.
Y llegamos con Ectypodus childei, el último de los Multis. En el pasado se propuso que su hiperespecialización los llevó a la ruina al competir con los roedores. Pero los parientes de Ecty mostraron que eso no era cierto, sino que coexistió con roedores durante más de 15 millones de años.
Su final llegó con el del Eoceno, una serie de eventos climáticos que culminaría con la congelación de la Antártida y la sustitución de los bosques tropicales y subtropicales por bosques templados y pastizales. Muchas especies de árboles terminaron por reducirse o incluso extinguirse. Este evento de extinción permitiría que muchos linajes de comedores de semillas y nueces se diversificaran, pero para los Multis significó la pérdida de su sustento.
Aquí vemos a Ecty sucumbiendo de inanición mientras un par de roedores inspeccionan con cautela su madriguera. Su fin, como el de centenares de especies, marca una transición entre los ecosistemas arcaicos del Eoceno tropical y los más modernos del Mioceno templado.
A primera vista no podrá ser muy impresionante, pero tomen en cuenta que este animal era el equivalente a un ornitorrinco de su época, una reliquia de un tiempo anterior. Y eventualmente, el ambiente del mismo ornitorrinco y del equidna terminará por degradarse, desapareciendo para siempre, un pedazo de la historia mamífera.
Así como a usted hace unos minutos no le llamaban la atención los multis, las futuras generaciones puede que no les llame la atención cuando se hable de los monotremas. Esperemos que ese día no llegue.
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Relatos del Fanerozoico
DiversosEl Sol esta muriendo y con el tambien lo hará la Tierra. Los oceanos se evaporaron y la vida se esta marchitando. Oculto en las montañas polares, donde las ultimas fuentes de agua liquida sobreviven, yace el aletargado Rinogrado Decápodo, el represe...