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La tormenta rugía afuera con una furia inclemente, haciendo imposible regresar a casa bajo la lluvia. Nos habíamos refugiado en la casa de Oscar, y tras poner a Evie a dormir, regresamos a la sala. La preocupación me invadía, aunque trataba de no mostrarlo.

-Puedes dormir en la habitación, Callie. Yo me quedaré en la sala.

-De ninguna manera, Oscar.-sacudí la cabeza.-Esa habitación es tuya, yo me quedaré en la sala."

-Estarás más cómoda en la cama grande.-insistió con una leve sonrisa en sus labios.

Decidida, me dirigí al sofá y me senté, buscando una de las cobijas cercanas para envolverme.

-Estoy perfectamente bien aquí.

Oscar se acercó, su expresión era una mezcla de diversión y determinación.

-No, este es mi lugar.-dijo sentándose a mi lado en el sofá.

Ambos reímos, compartiendo una complicidad que no había sentido en mucho tiempo.

-¿No te vas a ir del sofá?- pregunté, levantando una ceja.

-Para nada. Tendrás que irte a la cama.-respondió con un tono juguetón.

-Yo me senté primero.-repliqué, con una sonrisa desafiante.

-Esperaré a que te duermas para llevarte a la cama.-se inclinó un poco más cerca, sus ojos brillando con travesura. Solté una carcajada.

-Si me tocas, serás hombre muerto.-sentencié sosteniendo la mirada. Ambos reímos de nuevo, la tensión de los últimos días disipándose momentáneamente en nuestra pequeña disputa.

Nos miramos a los ojos, y en ese instante, el sonido de la tormenta pareció desvanecerse. La intensidad en su mirada me hizo sentir segura, a pesar de que el cielo se estuviese cayendo a pedazos. A pesar de que los relámpagos iluminaban la oscura noche y los truenos eran una banda sonora de terror.

-Espero que Evie no se despierte.-soltó rompiendo el silencio.

-No te preocupes, tiene el sueño terriblemente pesado. Como tú.-sonreí levemente.

-¿Cómo te fue en el trabajo?

Suspiré y me acomodé en el sofá.

-Últimamente todo está siendo un desastre. Siento que arreglo una cosa y otra se descompone.

-¿Es por la recta final del campeonato, verdad?

-Si. Solo quiero que este año acabe ya.-suspiré pesadamente.-¿Y tú? ¿Qué tal estás?

-Me estoy acostumbrando a esta nueva casa y a estar en París ahora. Hablé con el equipo y, como no tenemos nuevas actualizaciones en el monoplaza, no habrá problema porque me quede aquí. No tengo que ir a la fábrica tan seguido como antes.

-París es un buen lugar cuando te acostumbras. Al principio se siente solitario, pero encontrarás el gusto. Evie está muy feliz de que estés tan cerca ahora, y claro, puedes contar con Manuele y conmigo para lo que sea.-ofrecí con una leve sonrisa.

-Gracias, Callie.

-¿Puedo preguntarte algo?

-Adelante.-respondió decidido.

-¿Te vas a quedar definitivamente en París?-pregunté, tratando de mantener mi tono casual.

-Ese es el plan.-afirmó decidido.

-¿Y... Harper?

-Harper y yo lo hemos dejado.

-Lo siento tanto...-susurré sorprendida.-Siento que yo tuve que ver en que lo de ustedes...

◇ About You ◇ Oscar Piastri ♡Donde viven las historias. Descúbrelo ahora