El Asistente

TE QUIERO

Jane Moore entró por la puerta del despacho con una fina sonrisa en sus labios pintados. Se había hecho un recogido muy elegante, dejando su flequillo rubio y ondulado hacia un lado, y se había vestido acorde con la importante entrevista que estaba a punto de hacer: blazer negra sobre blusa blanca y pantalones pitillo. Dejó su gran bolsa con la cámara en el suelo del despacho y nos miró a Jung Kook y a mí, de pie al lado del sofá, esperando por ella.

—Jung Kook y Jimin... —dijo con deleite, acercándose un par de pasos para ofrecernos la mano—. Es un placer que hayan concedido esta entrevista a This is happening! Estamos muy agradecidos.

Jung Kook ya estaba inmerso en su papel del Soltero de Oro, sonriente, con su mano en mi espalda y una expresión de encantadora timidez en el rostro.

—Gracias a ti por venir, Jane —respondió—. Las cosas están un poco locas últimamente.

Ella sonrió más y asintió.

—Sí, muy locas... —afirmó antes de mirarme—. Jimin.

—Buenas noches, Jane —la saludé junto con un apretón de manos—. Estás muy guapa, casi pareces una periodista seria y profesional —la sonrisa se le torció en los labios por un momento, pero movió la cabeza y la recuperó rápidamente—. Oh, perdona —añadí, apartando la mano y recuperando una expresión más seria—. No quiero que pienses que estoy... flirteando contigo.

Eso sí que terminó por conseguir romper su fachada. Su sonrisa cambió a una más afilada y sus ojos azules se entornaron para mirarme fijamente. Entreabrió los labios, pero tardó un par de segundos en decir:

—Sabía que eras demasiado bueno para ser verdad. Ambos... —añadió, mirando también a Jung Kook a mi lado antes de girarse para ir en busca de su cámara.

Sin decir nada e ignorando por completo los consejos y comentarios del señor Lee sobre cómo debía hacer su trabajo, sacó la cámara de la bolsa junto a un atril y la colocó frente a la pared acristalada y los asientos, haciendo algunas pruebas de luz y enfoque mientras el Señor Jeon y yo nos sentábamos en el sofá. Lo habían colocado ladeado, entre donde estaría la cámara y la silla donde estaría Jane.

El Señor Jeon y yo estábamos cerca, un poco pegados, pero no demasiado, la luz del despacho era suave y a nuestras espaldas se podía ver la ciudad cubierta de las primeras sombras de la noche. Cuando estuvo todo listo, pulsó el botón de grabar y la luz roja se iluminó, algo de lo que fui muy consciente y por lo que puse una media sonrisa, mirando a Jung Kook para advertirle de que el espectáculo había comenzado. Lo primero que hizo él fue poner una mano en mi rodilla y acariciarme distraídamente con el pulgar.

Jane Moore se acercó a la silla de diseño que habían traído para ella y se sentó, cruzando los tobillos y abriendo su libreta de tapa roja. Con un bolígrafo de tinta negra tachó algo y miró a la cámara con una sonrisa.

—Tres, dos, uno... ¡Hola, soy Jane Moore y esto es This is Happening! Hoy tenemos con nosotros y en exclusiva a la gran revelación del año: Jeon Jung Kook y Park Jimin —y nos miró sin dejar de sonreír.

Estaba claro que aquella no iba a ser una entrevista seria, como había sido la primera que le había hecho al Señor Jeon, sino algo sensacionalista y estúpido. Aun así, Jung Kook fue rápido y miró a la cámara con su sonrisa de un millón de dólares, pero más suave y tímida de lo habitual, casi arrepentida, levantando una mano a forma de saludo como si hubiera un público real y no el señor Lee y su equipo mirándonos con cara muy seria. Yo giré el rostro y me limité a asentir con la cabeza.

—Jeon Jung Kook estaba manteniendo una relación pública con Lana Gómez, a la que todos conocemos y apreciamos, hasta que un vídeo sexual muy escandaloso salió a la luz y destapó la relación secreta del empresario, y por entonces conocido como Soltero de Oro de la ciudad, con su ayudante, Park Jimin —y nos miró—. Ya habían corrido numerosas especulaciones sobre vuestra supuesta relación, pero siempre lo habíais desmentido, diciendo que solo erais buenos amigos; justo aquí, en este mismo despacho y conmigo en una entrevista de hace unos meses. No fue hasta que el vídeo sexual salió a la luz cuando habéis decidido reconocerlo públicamente, dejando a una pobre mujer con el corazón roto después de haber jugado con ella y haberle mentido; además de a un gran número de seguidores y fans completamente decepcionados y dolidos al descubrir que uno de sus modelos a seguir no era más que un fraude ¿Qué pueden decirnos sobre eso?