Capítulo 01
El alquiler
La vida está llena de desafíos y de pruebas, algunas te enseñan algo y otras te enseñan a alguien. Este era el caso de una mujer cuyo desafío más grande era criar a su pequeño hijo Samuel; su gran amor, su vida entera, el pequeño de seis años quien vino a cambiarle la vida a su madre, quien no contaba con tanto para darle todo.
Tal era el caso de Juliana quien a sus 30 años trabajaba sin descansar para que su pequeño viera el mundo de una manera mejor, su esfuerzo día a día para que él no se diera cuenta de las carencias que ellos tenían.
Una deuda que pagar, a causa de la muerte de su papá, un recorte de horas en su trabajo, tocaba tener dos trabajos, pero quien cuidaría al pequeño.
- Te digo que es la decisión más difícil que he tomado. No puedes meter a cualquier persona en tu casa cuando tienes hijos. Hay mucha gente loca en estos tiempos. Mi Samy lo es todo, no sé qué haría si me le pasa algo. Le contaba la castaña a su mejor amigo y primo Sergio en su pijama sentada en la cocina, mirando un anuncio de periódico.
- Juliana has entrevistado más de diez personas y nadie te parece para ser tú roomie. Es solo por un tiempo, no vas a casarte con esa persona. Aunque no te vendría mal un nuevo amor. Decía Sergio quien también vivía en el departamento.
- No lo sé Sergio, las personas que han venido no son nada convencibles, tengo un bebé en casa y si alquilo la habitación es para poder pagar una niñera a mi hijo. Así tendré para otro trabajo y poder cubrir la deuda que tengo. La castaña se levantó y se sirvió su café.
- Bueno si tienes mucha razón en algo es que no han llegado personas acorde para mí, pero deberás elegir una persona pronto. Decía el chico quien comía una tostada.
- En una hora llega una persona, lo bueno es que es mujer y las mujeres somos menos complicadas en el tema de tener un niño en casa. Decía la castaña quien abrió el refrigerador y sacó un envase de leche y sirvió en un plato, luego echó cereales y se sentó en la mesa. Mientras Sergio se reía.
- ¿Las mujeres son menos complicadas? Eso es un chiste. Las mujeres son un desastre, pero admito que los hombres y los niños, pero las mujeres están locas. Decía el primo quien ahora se levantaba para tomar otra tostada.
- ¡Mamá! Decía el pequeño entrando en la cocina con su pijama de Batman y sus manitas estrujándose sus ojitos.
- Ven bebé, aquí. Mamá está aquí. Extendió sus brazos el pequeño y se fue con su mamá. Se sentó en sus piernas, dándole besos en sus mejillas y ojos.
- Tengo hambre mamá. Hoy no quiero ir a la escuela. Decía el pequeño castaño ojos marrones claros.
- Hoy no es día de escuela. ¿Quieres cereal? Pregunto la castaña a su hijo en brazos. Le volvió a dar un beso.
- Sí. Quiero cereal y muchos besos mamá. Volvió a abrazar la mujer a su pequeño.
- Ya te lo preparo. Se levantó y sentó a su pequeño en la silla y preparando un plato para él.
- Yo pienso que debes bajar los requisitos, o nadie va a querer vivir aquí, al menos nadie que esté totalmente cuerdo. Decía Sergio quien seguía su desayuno.
- Hoy tengo dos entrevistas. Una chica que viene dentro de una hora. Decía Juliana colocando el plato con cereales a su pequeño en la mesa. - Se llama Valentina. Espero que alguno de los dos me dé una buena impresión, porque este mes comienzo a pagar las cuotas del préstamo. Se sentó de nuevo Juliana y miró de nuevo su celular. Tomó su cereal y miró a su hijo.
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Roomie
FanfictionUna mujer con deudas y un pequeño que cuidar, decide alquilar una habitación de su departamento a una mujer desconocida, muy diferente en todo sentido a ella. Será una historia divertida y emocionante. Disfrútala