Roomie

13 La amante

Capítulo 13

La amante

Ciertamente que Lauren estaba hasta el tope por haber bebido demás. Valentina la observó dormida en la cama.

- Ay Lauren. Esa Camila del pasado te traumo ¿Dónde estará? Nunca hablas de ella solo en tus cumpleaños y no dices gran cosa. Luego recordó lo que dijo de su Juliana. Frunció el ceño y se levantó. - Con mi casera no te meterás. Esa mujer no es de tu mundo loco Lauren. Esa mujer... ¿Es para mí? Tomó su abrigo y salió de la habitación. Corriendo a la habitación de la castaña. Tocó a la puerta, la castaña la observó y sonrió la rubia. Juliana buscaba cualquier indicio de que Valentina no hubiera cumplido.

- ¿Ella? Juliana no sabía cómo preguntar. La adrenalina con la que le exigió no estar con Lauren había pasado. Valentina se acercó a la castaña y está un poco nerviosa, miró sus ojos.

- No pasó. Mordió su labio y le sonrió de nuevo. - ¿Vamos a la playa?

- ¿A esta hora? Preguntó la castaña sorprendida. La rubia emocionada le asintió.

- Me cambio de ropa y vamos a caminar. Juliana pues solo asintió y sonrió.

***

Yacían dos hermosas mujeres caminando por la playa. La rubia tomó la mano de la castaña. Está sintiendo el golpeteo en su corazón, algo que aún le costaba descifrar. Algo que aún no sabía cómo canalizar, no sabía cómo actuar y cómo ser. Ella solo quería sentir y dejar fluir, los pensamientos de Juliana no eran fáciles de manejar. No eran sencillos de equilibrar, por cada segundo ella pensando en algo y era lo que la desenfocaba de darle rienda suelta a sus deseos.

- Eso de ir a mi habitación a exigirme que no me fuera. Fue muy dominante y bastante gay. Para no ser gay eres muy profesional. Sonrío la castaña y está apretó la mano de la otra.

- Tengo muchos temores. Nunca me había pasado algo así. Para ti debe ser sencillo saber qué hacer. Yo jamás había visto a una mujer con otros deseos. Nunca he volteado a ver a una mujer en la calle. Y ahora quiero... Se detuvo la mujer. Tomó la otra mano de Valentina. - Pero tú estás en mi cabeza, estás ocupando un espacio muy importante en el. Un espacio que no pensaba dejar ocupar a nadie y esto de ser gay no sé cómo se hace, cómo se trabaja. Ni si quiera.

- Dejemos fluir esto. Yo estaré contigo. No es algo que debas aprender, solo se tu misma. Esto es dejar de pensar en el que dirán, dejar de pensar en las complicaciones.

- Más que eso. Me preocupa mi hijo y que tú me rompas el corazón. No solo a mí a mi Samy. Mi bebé está enamorado de ti. No sé si te has dado cuenta. Ese chico le brillan los ojos por ti.

- Seria el único por el cual sería hetero. Ambas sonrieron. También me da miedo perder a ese niño.

- Él te quiere. Nunca me interpondría entre ustedes dos. Tienen una conexión única. Yo no podría meterme en medio. Se quedó callada mirando al océano.

- ¿A que le tienes miedo Juliana?

- A enamorarme de ti y que te vayas. A entregarte mi corazón y que tú sólo estés por pasar el tiempo conmigo. Eres la amante de mi jefa.

- Ya no.

- ¿Desde cuándo? ¿Desde hace dos horas? Juliana tocando el tema nuevamente.

Valentina quien miraba frente a frente a la castaña. Se acercó más a ella. Bajo sus manos a la cintura de la chica, la atrajo más a ella.