Capítulo 45
Es mío
- Es el hijo de Gonzalo. Dale la oportunidad a mi pobre hijo de conocer a su hijo y hablar con él. Seguía diciendo la mujer.
- ¿Qué pasó? Preguntó Valentina acercándose y observando que algo estaba molestando a su mujer y dejando nervioso a su príncipe.
- Mami Val tengo miedo. Expresó el pequeño. Acercándose a ella.
- Está con la bandeja en sus manos, miró al pequeño.
- Ven mi amor, vamos. Colócate detrás de mí. El niño inmediatamente se colocó detrás de Valentina y le tomó del pantalón.
- Que vergüenza la que estás haciendo pasar a este pobre niño. Cuando esté grande entenderá que es una aberración esto que tú estás haciendo. La mujer seguía hablando.
- Basta Iris. Pondré una orden en tu contra y en contra de Gonzalo.
- Ese niño es hijo de Gonzalo y tiene todo el derecho de quedárselo, no se lo puedes prohibir. Miró al pequeño soy tu abuela. Tendrás una mejor vida con...
- Cállese señora, no le voy a permitir que su hijo y usted vengan a llenar de miedo a mi niño. Sí no quiere que llame a seguridad y arme un drama diciendo que usted se quiere robar a mi hijo, es mejor que se vaya. Juls toma a Samy y ve hasta la puerta de la entrada del cine. Ninguna persona nos va a arruinar la noche y a usted señora. Se acercó a ella y le susurró casi en un grito. - Una palabra más delante de mi familia y allí me va a conocer muy bien. Juliana tuvo los pantalones que a su hijo le faltó y usted lo apoyó cuando una jovencita indefensa no tenía a dónde ir. Así que vaya a decirle a su hijo que Juliana no está sola y que esté niño no es un objeto que se deja y luego se viene a reclamar derechos. La mujer quedó en silencio mordiéndose los labios de la rabia. Valentina dejó la bandeja en un lugar y fue detrás de sus amores y tomó a Samy y lo abrazó. Luego tomó por la cintura a su chica le dio un beso en la mejilla.
- Te amo. Te amo. Todo estará bien. Le dijo la rubia a Juliana y luego miró ahora al pequeño. Le sonrió para calmarlo. - Tú eres lo más bellos de nuestras vidas príncipe. En este mundo hay gente muy loca, pero vamos a cuidarte y protegerte siempre.
- Tenía miedo mami Val. Esa señora me quería llevar y yo no quería. Juliana aguantaba las ganas de llorar y gritar. Valentina le dejó un beso en los labios y la rubia le volvió a dar un beso en la mejilla al pequeño.
- Aquí te vamos a cuidar siempre. Vamos por las sodas que ya la película va a comenzar y no queremos que Batman se vaya del cine. El pequeño recordó que dentro de la sala verían una película.
- Mami Val. Corre. No quiero que se vaya Batman. Juliana sonrió. Miró a la rubia y le dejó un beso en la comisura de los labios.
- Ve amor, busca la soda. Samy y yo te esperamos aquí.
La noche fue más tranquila. Valentina tranquilizó a sus dos amores y lograron ver la película sin los malos pensamientos que pudieran generar la familia del pequeño.
- Gracias por ser mi mujer. Expresó Juliana a su rubia. Estaban saliendo del cine tomadas de las manos y con Samy tomado de la mano de Valentina.
- Te amo Juls. Los voy a cuidar de cualquier loco o loca. Tú solo ponte bonita siempre. Juliana sonrió y así se fueron a casa.
Estando en casa, Juliana le contaba un cuento a su príncipe. Cuando acabó le dejo un beso en su frente y él le sorprendió con lo que le dijo.
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Roomie
FanfictionUna mujer con deudas y un pequeño que cuidar, decide alquilar una habitación de su departamento a una mujer desconocida, muy diferente en todo sentido a ella. Será una historia divertida y emocionante. Disfrútala