El otro plan
GIA
Teníamos un plan. Iba bien. Creí que teníamos todo controlado. Entonces Nam llamó por móvil a Roman, que estaba haciéndome compañía, y ahora no tengo idea de qué está sucediendo.
—Tranquila, Gigi. Namjoon no dijo la palabra clave, así que está todo bien. Iré y volveré con él, ¿de acuerdo?
Eso fue todo lo que Roman dijo antes de brindarme una sonrisa compasiva y salir por la puerta principal, puerta que no he podido dejar de mirar desde entonces.
Camino de un lado al otro de la habitación mientras me muerdo la uña de mi dedo pulgar. Cada sonido en el exterior, cada paso que se oye desde el pasillo, me tensa.
¿Demorarán mucho? ¿Por qué le habrá pedido Nam a Roman que vaya al lugar donde se encontraría con Yitian? ¿Se encuentran en peligro? ¿Algo salió diferente a lo planeado?
No, Gia. Tranquila. Si fuera así, Nam nos hubiera alertado, y no lo hizo. Roman me aseguró que no dijo la palabra clave, esa que acordamos usar si algo salía mal.
Pero entonces ¿debo creer en Roman?
Me detengo frente a la puerta, con la yema de mi dedo en la boca, y considero coger el picaporte para salir. Salir y...
Mi móvil suena, deteniéndome súbitamente.
Es un mensaje.
No te preocupes. Todo saldrá bien. Espérame.
Como si hubiera podido sentir mi temor e inquietud a la distancia, Nam me ha enviado ese conciso mensaje. Todavía de pie frente a la puerta cerrada, releo la última oración.
—Te espero —musito luego de haberla grabado a fuego en mi mente.
De hecho, todo lo que puedo hacer justo ahora es eso: esperarlo.
No respondo a su mensaje porque sé que nos hallamos en una situación comprometedora, pero mi alma le hace la promesa.
No me moveré de aquí hasta que regrese.
Puedo soportar la presión entre estas cuatro paredes si eso significa que volveré a verlo. A verlos. También quiero de regreso a Roman. Necesito tenerlo aquí, no solo porque es una parte esencial de nuestro plan sino también porque, en las últimas horas, me di cuenta de que apenas hemos hablado de nosotros, de nuestras vidas, y quiero saber cómo ha ido toda su vida, no solo la parte relacionada con los Forte. Algo en su mirada me dijo que han pasado muchas cosas, y sinceramente quiero estar para él, así como él estuvo durante años para mí.
Al pensar en cuán solitaria debió ser su vida los últimos meses, me estremezco. Yo tuve a Nam y, aunque pude compartir poco con ella, a Ava. ¿Roman tuvo a alguien? Lo dudo, más aún, sabiendo cuán de cerca ha sido vigilado siempre.
Después de todo, por esa razón fue que ideé este plan.
Desde que tengo recuerdos, Roman nunca ha viajado solo. Quizá Maxwell se ha quedado en Castacana varias veces, pero Dorian siempre ha estado pisando sus talones. Lo ha controlado como a nadie.
Él jamás dejaría a Roman a cargo de algo. Y por eso supuse que debía estar en Italia también. Y si escuchó la conversación que Nam y yo tuvimos con su sobrino, que es lo más probable debido a su falta de confianza en Roman, entonces debe estar asegurándose de que el cetro de su bóveda esté más seguro que nunca, lo que nos dejaría despejado el camino hacia el falso, el cual robaremos y entregaremos a Zhang Wei, si es que Nam no consigue contactos de Yitian para crear una réplica.
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ÁMSTERDAM | Namjoon
Fiksi PenggemarTercer libro de la serie Sangre, sudor y lágrimas. "―Tengo el presentimiento de que me gustará. ¿Por qué no avanzas? ―Porque también tengo un presentimiento. ―¿De qué? ―De que una vez dentro de ti no querré salirme. ―¿Y eso es malo? ―Podría serlo."