El Cruel Destino

Arco 1. Capítulo 19

-Entrena por un par de semanas más con tu amigo. Luego ve a pelear en el gimnasio...-

Algunos días atrás, la Gardevoir y la Lilligant se habían marchado del departamento del Lucario luego de su combate contra el Gallade.
Luego de conversar un poco con el joven, la tímida chica terminó marchándose del lugar con su pareja, dejando solo al Gallade que había tenido una inesperada conversación.
Una extraña entidad se materializó en la oscuridad de la casa, pareciendo instruir al Gallade sobre un futuro próximo.

-Tu antigua jefa... Luna, hará un ataque que decidirá tu vida o muerte... Si no obedeces tu y ese amigo tuyo van a morir... Así que no dudes en ningún momento...-

Luna, una Absol que estaba invadida por la ira y el rencor, con una sed de venganza que le permite seguir avanzando se encontraba sonriendo en un pasillo oscuro frente a un pequeño Sableye quien cargaba una PokeBall.

-Si sales vencedor en ese combate... Todo tu destino se sellará y evento tras otro ocurrirán como un efecto dominó... Sin que nadie pueda apartarlo...-

Finalmente, cuando la sombra desaparece de su encuentro con el joven empieza a salir en una extraña cueva, su figura lentamente saliendo de la pared hasta finalmente salir por completo de la oscuridad, mostrándose ante la cueva solitaria.

-Lamento no poder decirte más, mocoso... Si todo fuera tan fácil no involucraría a tantos inocentes... Pero hay que cometer riesgos para evitar ese genocidio mundial...-

Decía el Darkrai flotando suavemente por la cueva hasta llegar a una zona clara, viendo así las piezas sobre la mesa y metiendo su garra negra en una bolsa termina sacando las piezas de un Sableye y un Ferropaladin, colocándolo cerca de las piezas de un grupo, entre ellos el Gallade, Lucario, Lopunny, Miltank y Slaking sobre un pueblo en el norte de Kanto.

-Es hora... Asegúrate de traerlo... Vivo o muerto...-

Dice una Absol hacia el Sableye que salía poco a poco caminando por el largo pasillo hacia la luz.

-Vamos, Ferropaladin... Es hora de cobrar unas deudas.-

Dice el Sableye dejando salir al Ferropaladin de su PokeBall, ambos caminando con pasos firmes hasta que la luz del exterior termina cubriendo sus cuerpos.

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Arco 1: Búsqueda del Pasado.
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Un par de días atrás en las afueras de Pueblo Amatista, la luna se postraba gloriosamente en su punto más alto a medida que el frío viento se desplazaba con el sonido de las hojas en movimiento.
Un Pokémon encapuchado estaba mirando el Pueblo Amatista pacientemente, era el mismo Pokémon que había empezado a trabajar para Luna un par de semanas atrás, ahora mismo en medio de una misión recibiendo una llamada en el transmisor.

-Z ¿Cómo va la investigación?.-

La voz del Sableye se escuchaba claramente a través de la llamada, haciendo que el Pokémon observe atentamente un departamento, notando apenas a través de las cortinas del balcón unos pies descansando en el sofá.

-Salen a las cuatro de la madrugada a trotar, terminan dentro de hora y media en el edificio, de ahí suben a la azotea a terminar el entrenamiento y a las seis ya se están llendo a su trabajo, llega a las seis con cuarto y de ahí trabaja hasta las cinco con un descanso a mediodía para el almuerzo, dependiendo del día regresa a casa, sale a tomar, habla con las mujeres del templo o regresa a casa.-