Entre la Sombra de la Libertad ©

Días (In)Felices

Eran las siete de la mañana del segundo día de noviembre, Ivana dormía a lado de Marina, después del incendio había decidido quedarse con ella algunos días, Ramón lo había entendido para que pudiera sobrellevar la situación del antro, había estado en comunicación con Ámbar y Jacqueline para hablar acerca de los costos de reparación del lugar, por eso había estado tan cansada en los últimos días.

—Feliz cumpleaños amor! —Despertó ella con un pastel de chocolate, tenía escrito el nombre de Ivana, Osmar llevaba una caja de regalo, y el teléfono en el otro, en la otra línea estaban sus amigas.

La pelirroja abrió los ojos con dificultad, mientras los veía sonriendo, no pudo evitar contagiarse de la alegría, que ellos le provocaban, a pesar de los días difíciles contaba con ellos.

—Gracias... —Respondió agarrando el pastel, dándole una pasada con el dedo saboreándolo. —Me encanta el pastel... Y... ¿Me van a regalar una cogida?

—¡Ivana! —Osmar dejó el regalo en la cama mientras sostenía el celular. —Bueno chicas, las dejo, que mi princesa quiere su regalo de cumpleaños. —Colgó ante la protesta de Ámbar, aventó el celular a la cama y se acercó para besarla, Marina tomó el pastel y se lo puso en los labios y el cuello.

—¿Ya te dije feliz cumpleaños?

—Mmm... Todavía no. —Respondió a su pareja a pesar de que ya la había felicitado.

Por otro lado, Hashed y Ramón subían a la camioneta varios regalos que los miembros de Fénix habían decidido comprarle a la joven diversos regalos que a ella le gustaban, como vestidos, zapatillas, joyas y bolsos, excepto Sofía, que le había mandado a hacer un retrato de ellas dos en un viaje que tuvieran juntas antes de que Sofía dejara de ser Epsilon.

—No creo que a ella le guste. —Habló Sera.

—Cierra la boca. —Chilló guardando la imagen.

Iban a prepararse para hacerle una gran celebración a Ivana, había logrado hacerse amigo de ellos en poco tiempo y ahora era de las más leales integrantes de los Fénix, celaba por el bien de todos ellos sin dejar de lado a Marina y Osmar.

Al llegar a la casa de Marina, la joven estaba descansando sin ropa, Marina y Osmar la abrazaban con cariño mientras platicaban de los mejores sucesos que habían vivido con ella, hasta que la puerta se abrió de golpe y todos los vieron desnudos.

—¡Feliz cum....!

Sofía colapsó al ver a Ivana sin ropa, mientras se iba a llorar a la entrada.

Los tres rápidamente se cubrieron de pies a cabeza, avergonzados de ser encontrados de esa manera, los dejaron ahí para que pudieran cambiarse y salir.

Al salir de la habitación, Ivana sonrió avergonzada y con toda la cara sonrojada.

—No coman del pastel. —Advirtió Marina divertida mientras Sofía decidía salir de la fiesta.

Abrió el regalo que le había llevado Osmar, era un kit de maquillaje, y una cajita musical con la canción que había escuchado: Sweater Weather, la primera canción que ella escuchó cuando se volvió libre.

Estaba feliz de cumplir otro año de vida, feliz de conocerlos a todos, se habían vuelto importantes para ella...

Pero algo la inquietaba, el corazón le dolía al perder la mayor fuente de ingresos que tenía en Sevilla, era momento de pensar en ella.

Tocó un vaso de cristal, golpeándolo con una cuchara, llamando la atención de todos en el lugar, esperando a que hablara.

—Chicos, estoy muy feliz de estar con ustedes, se han vuelto personas muy importantes para mí, agradezco el recibimiento que me dieron a mí, a Osmar y a Marina... —Vio a sus amigos. —Los amo... Pero decidí salirme... En enero del siguiente año, dejaré de pertenecer al grupo. —Dijo.

Ramón y Hashed ya sabían de la decisión que ella había tomado, los demás la tomaron con sorpresa, tendrían que volver a hacer ajustes en el equipo y reemplazarla.

Algunos dudaban de que fuera buena idea dejarla ir, podría volverse del bando enemigo... O quizás vender a Ramón.

No importaba, se trataba de Ivana Cananseco, la mujer que mató a Derek Cananseco y la cual logró superar el trauma que vivió de niña.

Era valiente y se había ganado la libertad.

Todos la abrazaron con amor, haciéndola sentir mejor, la iban a extrañar, pero al menos podrían seguir viéndola de vez en cuando.

Claro, era una noticia que a Sofía no le iba a caer muy bien.

Después de la fiesta, Marina fue hasta la habitación que compartía con Ivana temporalmente, la abrazó por la espada mientras la joven pelirroja se trenzaba.

—¿De verdad dejarás la mafia?

—Lo haré. —La volteó a ver. —Porque el día del incendio, sentí que te perdía... Yo no sobrevivo sin ti. —Dejó de peinarse, para voltear hasta quedar frente a frente. —Te amo Marina, y eres lo más importante para mí, así que sí, voy a dejar al equipo... —La besó, después de un minuto de besos, la volvió a mirar a los ojos, chocando sus cabezas. —Tendremos una casa frente al mar, cenando mariscos y bebiendo vino rosa... Quiero que seas la mujer más feliz del mundo, porque yo lo soy de estar contigo...

Las dos se siguieron besando hasta quedar sin ropa y volver a tener sexo.

Fuera del cuarto, Osmar jugaba videojuegos en su celular, cuando alguien tocó a la puerta, se le hacía raro que alguien llamara a la puerta a las ocho de la noche, abrió, viendo a Ámbar.

—Oh, hola pequeña, ¿Cómo estás?

—Yo... —Lo besó de imprevisto, dejándolo aturdido. —Perdón... —Ella sola cerró la puerta, para irse corriendo al taxi que la estaba esperando.

—¿Qué demonios?... —Extrañado, regresó a jugar, nunca había pensado en estar con la hija del hombre que violó a Ivana, con la hermana del que mató a Olivia...

Nunca pensó en tener algo sentimental con alguien más que no fuera Ivana.

Ivana tenía intenciones de casarse con Marina, no podría estar con ella mucho tiempo más por respeto...

Tal vez era hora de... Enamorarse.

Es todo por el momento, nos leemos la próxima.

A continuación, la ficha de personaje del día:

Nombre: Louie Arca
Edad:19
Orientación sexual: Heterosexual
Cumpleaños: 22 de octubre
Signo Zodiacal: Libra
Comida favorita: Pizza
Bebida Favorita: Agua de jamaica
Ciudad: Sevilla, España
Hobbies: Baloncesto