Entre la Sombra de la Libertad ©

Disfrutando de un mundo nuevo

POV RAMÓN:

Soy... Jefe de la mafia... Todavía no puedo creerlo...

Hace unos meses me declararon como jefe de la mafia, ¿Quién me declaró? Mi padre, quien hasta hace unas semanas antes de este suceso creí que había muerto y no, sigue vivo para bien o para mal, como sea, ha habido unos cambios en estos últimos cuatro meses, dejamos de vivir en la guarida de los Fénix, ahora la usamos como una bodega de armas y en dónde llegarán las grandes cantidades de narcóticos, todo eso será supervisado por los grupos menores de mafiosos, los que corren menos riesgo de ser perseguidos por la policía u gente que no está de acuerdo con este nombramiento.

Y aunque les moleste, yo por lo menos no tengo quince años ni adicción a las drogas.

Ahora vivíamos en una mansión en el mismo condominio de Fabrizio, nos habíamos mudado a Écija, era una mansión enorme, de más de veinte habitaciones, un gigante jardín con una mesa de campo, había una fuente de mármol en forma de sirena, sin duda lo mejor era el interior, había una pantalla plasma en la sala principal, en el salón de juntas había otra del mismo tamaño, también había una cocina inteligente, cámaras de seguridad de audio y vídeo en las afueras del lugar, además de un salón de juegos, sala de spa y muchos autos último modelo, eso sin contar que cada habitación estaba personalizada para mis amigos, con dos pantallas, un baño privado y un frigobar en cada una.

Si el paraíso existe, sin duda es igual a una mansión de Écija.

Lo mejor era mi oficina, estaba en lo más alto del edificio, además de que contaba con un balcón de piedra en el que podía ver todo lo que ocurría en el condominio, era como un cielo personal, puedo acostumbrarme a estos lujos, ser líder nunca había sido tan perfecto.

—¡Hola, hola! —Entró Fabrizio con Hashed, parecían estar muy animados, ambos llevaban unos shorts marrones y playeras que por poco y transparentaban el abdomen de ambos. —Voy a ir a jugar tenis con Hashed y otros amigos, ¿Vienes?

—Aceptaría la oferta, pero debo checar que la droga enviada a Barcelona haya llegado sin complicaciones y también pedir que distribuyan armas a la frontera con Francia. —La verdad es que no soy fanático del tenis, prefiero los deportes de contacto como el hockey, el soccer o el fútbol americano.

—Es una lastima, vamos Hashed. —Se fueron.

Ya no estoy dentro de una oficina pequeña que huele a humedad, aquí puedo tener a mi equipo metido sin problema, aunque claro, extrañaré el hogar que vio crecer al equipo de los Fénix.

La puerta de la oficina se abrió de golpe, Ivana estaba detrás de una mujer de cabello negro y pecas, podría reconocerla así pasaran siglos.

—¡Señoritas no pueden entrar! —Regañó Ivana.

—¿Me extrañaste Ramy?

Lorian Fox fue mi novia, trabaja con Fabrizio en el turno de noche, pero cuando la conocí era recepcionista en la mañana, terminamos porque la descubrí teniendo relaciones sexuales con Diego Person, terminamos un mes antes de que esté fuera asesinado, hacía tiempo que no la veía, junto a ella también estana Keyla, la segunda recepcionista de Fabrizio, ambas llevaban el uniforme de trabajo, así que probablemente iba saliendo Keyla y entrando Lorian.

—¿Qué hacen aquí? —Pregunté indicándole a Ivana que ahora yo me encargaría de ellas.

Apenas cerré la puerta, Lorian se lanzó sobre mí, tirándome, me empezó a besar, yo estaba atónito, había dejado de visitar a Fabrizio por las noches con tal de no verla, Keyla solo sonreía.

—Felicidades por tu nombramiento Ramón. —Dijo divertida por la escena.

Extrañaba los labios de Lorian... Maldito Diego...

—Deja que te demos tu regalo de nombramiento. —Lorian se quitó la blusa, estaba encima de mí con una sonrisa coqueta, esa sonrisa que me daba cuando tenía cualquier intención de coger.

Keyla también se quitó la blusa, parece que en este día iba a tener mucha diversión...
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Cuatro horas más tarde, la puerta fue abierta de golpe, creo que olvidé ponerle seguro, Hashed había regresado del juego con Fabrizio, yo desperté de golpe por el ruido que hicieron al abrir, mientras mis jóvenes amantes dormían plácidamente en la alfombra.

—Dijeron que era mi regalo de felicitación. —Sonreí.

—Nos mudamos hace casi cinco meses. —Hashed parecía indignado pero a la vez algo feliz, al igual que yo.

Desperté a las chicas que al ver a Fabrizio se cambiaron a gran velocidad, salieron junto a él, mientras yo me quedaba con Hashed, así que ya estaba esperando un sermón para que me diga lo mal que hice al aceptar volver a tener relaciones con Lorian pero para mí sorpresa, no lo dijo, al contrario, fijó su atención en otro acontecimiento.

—Renato estuvo a punto de decirle a tu madre que Rogelio sigue con vida.

—Maldición, le dije que cerrara el pinche hocico. —Debo mantener callado a Renato antes de que diga algo que nos perjudique o haga que mamá sufra de un paro cardíaco y nos abandone de verdad. —¿Cómo lo callaste?

—Le quité el teléfono. —Respondió mostrando. —¿Hasta cuándo vas a seguir callando todo? Angelique debería saberlo, él es su esposo, también merece saberlo Rita, Cooper, Rucian, Osiris y tu sobrina, merecen conocer la verdad. —Regañó.

En el fondo odiaba que él tuviera razón, pero no recuerdo cómo era la relación con mi padre, mis recuerdos con él son muy borrosos. No sé cómo va a reaccionar mamá con esto

—Déjame en paz. —Contesté mientras me vestía, Hashed dejó el teléfono de Renato en mi escritorio y después salió de la oficina, debo de solucionar mis problemas familiares también, cambiará la vida de mi mamá... Salí en busca de Renato que estaba en su habitación, mirando el techo, era igual de grande que mi oficina, en la cama podían caber hasta cinco Renatos.

— ¿Qué haces aquí? —No era capaz de mirarme. —Lárgate de aquí.

—Debemos hablar —Suspiré acercándome a él. —, no como jefe, como mi hermano menor... Debemos organizar como le diremos a mamá que Roge... Nuestro padre, sigue con vida.

Dejó de ver al techo para mirarme.

—¿Lo dices en serio? —Aunque se mostraba serio, sus ojos mostraban alegría, en el fondo seguía siendo un niño.

—Sí. —Me acosté con él para mirar el techo.

—Apestas a sexo. —Me dijo lanzándome una almohada.

Espero que esto arregle un poco la relación que tengo con mi familia...

Todavía no lo puedo creer... Yo soy el lider de la mafia... Soy el líder... Y debo de actuar como tal, por el bien de todos los que me rodean.

Es todo por ahora :3 no hay nada más que decir, así que, nos leemos la próxima.

A continuación, les dejo la ficha de personaje del día:

Nombre: Lorian Fox
Edad: 25
Orientación sexual: Heterosexual
Cumpleaños: 8 de junio
Signo Zodiacal: Geminis
Comida favorita: Salmón ahumado
Bebida Favorita: Tequila
Ciudad: Turquía
Hobbies: Ir de compras y tomar café