『ɴᴜᴇsᴛʀᴏ sᴇᴄʀᴇᴛᴏ』

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Bakugou golpea su cabeza con la pared por décima octava vez, cerrando los párpados con fuerza mientras frunce el ceño.

—¿Ya deberían estar en la guarida, no?

—Seguramente.

Escucha con auténtico desgano y frustración la conversación de sus compañeros, quienes observan el reloj sobre la mesa con atención, intercambiando palabras.

Desearía haber hecho caso cuando Kirishima le propuso instalar cámaras en la guarida.

Quién sabe las estupideces que le debe estar diciendo Shindou a Todoroki en estos momentos.

—Aún podemos ir a ver —menciona Yaoyorozu, inquieta.

Él abre un ojo.

—No —responde Bakugou, sin apartar la mirada de la pared—. Ese imbécil cabeza de piña me aseguró que si intentaba esconderme para verlos, lastimaría a Shouto.

—¿Y qué te asegura que nada le pasará?

—Porque confío en él.

El silencio hace presencia en todo el lugar, con Sero mirando a Kaminari y Yaoyorozu frunciendo el ceño, no muy segura de su respuesta.

—Sé que si algo pasa, él me llamará. Le envié un mensaje para que me llamase si se presentaba una... situación. Dudo que haya leído el mensaje, pero no importa.

Jirou suspira, mirando el suelo.

(...)

—Vaya, vaya... creí que no vendrías —menciona Shindou con una sonrisa, moviendo la silla hacia atrás.

—¿Tenía otra opción?

—Para tu mala suerte, no.

Shouto toma asiento, hundiendo el ceño ante su respuesta. Se dedica a mantener una postura recta una vez sentado, mirando la mesa.

—¿Arrepentido? —pronuncia el otro.

—No —él suelta una exhalación, cerrando los ojos—. Si crees que me dejaré intimidar por tí estás equivocado.

El contrario sonríe de lado, soltando una risa nasal. Se cruza de brazos sobre su pecho, mirándolo fijamente con lo que parece ser burla.

Entonces Shouto le devuelve la mirada, su expresión es de total seriedad.

—¿Aún estás triste por saber que tu novio hizo una apuesta sobre tí?

Ver como cerraba los ojos abruptamente y apartaba la mirada hacia otra parte fue algo que realmente había esperado. Sin embargo, llegó a pensar que se permitiría verse más vulnerable. Obviamente él no se dejaría ver así de desanimado y afligido.

—No estoy triste. Simplemente... es algo difícil de asimilar.

—Mhm —emite, fingiendo comprensión—. Entregar tu confianza a alguien con quien te sentías seguro, y recibir la noticia de que esa misma persona te utilizó como un “trofeo” sin dudarlo dos veces... —acaba por murmurar, alzando ambas cejas. Su mirada está fija en el bicolor, esperando alguna reacción de su parte.

Silencio fue solamente lo que obtuvo por varios y largos minutos.

Comenzaba a creer que Todoroki ya estaba dudando un poco. Con lo que ya presenció hoy en el mediodía, está seguro de que ya no siente la misma confianza que antes hacia Bakugou. No cuando, a perspectiva de cualquiera, Bakugou lo trató como un objeto.

Y sabe que algo como eso debe dolerle a Todoroki. Y mucho. Pues es ajeno a que el bicolor no es alguien que confíe tan plenamente en otra persona, mucho menos en alguien tan problemático como Katsuki. Y esta es una perfecta oportunidad para hacerle creer que Bakugou aceptó apostarlo voluntariamente sin pensarlo siquiera.