Cuando ella despierta en una fiesta en las vegas Con sus amigas, se da cuenta que esta casada con un hombre que conoció esa misma noche de la fiesta, nada podía salir bien.
La tentación para Evelyn Hazel conocer a un hombre llamado Darius Beaumont a...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
___ No pienso soltarte ___
Evelyn Hazel
Cuándo despierto por la luz de la terraza molestando me incorporé sentándome en la orilla de la cama, veo que no era mi habitación era la de Darius se quedaba a dormir me levanté y fui a mi habitación para poder arreglarme.
Tras entrar a mi habitación me estiro mientras me deshago la ropa de pijama quedándome completamente desnuda camino con delicadeza hasta el baño cuando entró dejó la regadera correr el agua tibia para que saliera. Entró a la ducha mojando mi cuerpo incluyendo mi pelo.
Salgo del baño envuelta una toalla mirando me siento en la cama agarrando la crema de todo mi cuerpo incluyendo mis piernas cuando termino de usar crema, me levanté de la cama buscando una ropa interior color rosado lo miro sonriendo me lo pongo. Estaba dudando qué ropa usaría y tanto buscar o opté por una polera rosada con un short corto que mostraba mucho mi muslo, salgo de la habitación caminando por el pasillo bajando las escaleras llegando al primer piso.
Llegó a la cocina viendo a mi padre Harris, mi hermano Emanuel con Darius tomando desayuno estaban hablando pero cuando me vieron entrar se quedaron callados.
—Buenos días a todos —murmuró acompañado con un bostezo.
—Buenos días hija mía —sonríe su padre.
—Hola hermana.
—Buenos días Hermano —comentó mirando a mi hermano.
—Buenos días amor —sonríe alegremente, al ver que se acercaba para depositar un beso en mi mejilla para servirse un capuchino vainilla.
—Buenos días amore mía, ¿dormiste bien ayer?
—Si, dormir bien querido por cierto hoy quiero caminar por roma, ¿te parece Darius?
—Esta bien amore, mejor desayuna entonces para que podamos salir a caminar —me levanté tras terminar mi desayuno.
—No lleguen tarde ya saben mi orden de horario —habla Harris.
—Sí papá no pienso llegar tarde a casa esta noche tengo que salir con yara en la noche a comprar unas cosas.
—Bueno hija mía.
Sonriendo amablemente tomando desayuno con tranquilidad mientras de reojo a Emanuel que tenía ganas de matar a Darius con su mirada lo decía todo miro a mi hermano con advertencia para que tuviera con cuidado con lo que iba a decir.
En el transcurso del tercer día estando en Italia en roma en mi país natal Darius salimos de casa caminando por las calles de roma viendo muchos lugares hermosos mi esposo me compraba muchas cosas que me gustaban o me llamaba la atención hasta el punto que me detengo en una tienda en la repisa había un collar hermoso era un corazón de color gris como los ojos de Darius.
