Who is Park Jimin? [Y.M] [✓]

29

—¿Cómo es posible que se haya escapado? —habló el hombre.

—No lo sé. —miraron los cadáveres.

—Hay que encontrarlo nuevamente. —dijo el hombre. —y romperle las piernas si intenta huir nuevamente.

—Solo sé que está con un hombre pálido. —se acercó la mujer.

—Sunoo averigua quién es. —se giró y vio al chico.

—Sí, padre. —asintió. —Él mencionó a Agust D.

—¿El mafioso? —preguntó.

—Así es. —respondió. —dijo que Agust D y él tienen una relación.

—Debe de ser un chiste. —se burló el hombre. —nadie conoce la identidad de Agust D y no creo que ese tarado de igual forma.

—Parecía bastante seguro. —le dijo.

Las personas vieron los cadáveres y solo se fueron de ahí luego lideraría con los cadáveres, ahora su principal objetivo era Jimin, traerlo de regreso y hacerle saber quienes mandaban en ese lugar. Jimin, por otra parte, estaba en su habitación con los ojos cerrados, una pequeña llovizna había arruinado su viaje por lo cual se habían quedado en la mansión. Este podía escuchar pequeños susurros en su cabeza, él abrió los ojos y se dirigió al cajón donde había puesto sus cosas y vio la pequeña bolsita con polvo blanco.

El saco un poco y se lo llevó a la nariz para acostarse en el suelo mientras su mundo giraba por lo que había consumido luego de guardar todo, él podía sentir como los susurros se iban y todo quedaba en silencio, Yoongi leía el periódico, hasta que vio como el menor venía caminando despacio, su mirada se veía apagada y eso le preocupaba.

—Jimin. —lo llamo y este se giró para verlo. —¿Te encuentras bien?

El chico se acercó despacio y se sentó en las piernas del pálido y lo observo detalladamente, Yoongi trataba de descifrar lo que ocurría con Jimin, tratar de que este se abriera con él, pero le era imposible si este se cerraba cada vez más. El menor se recostó en el pecho del pálido para inhalar su fragancia masculina invictus de paco rabanne, Yoongi solo le acaricio la espalda para mostrarle su apoyo.

—Asesiné a dos personas ayer. —mencionó. —y me gustó.

—Jimin. —Lo llamo suave.

—Eran monstruos. —dijo. —los que me atormentaban día y noche cuando era niño.

—¿Por qué no me dijiste? —le pregunto. —sabes que puedes contar conmigo siempre.

—No lo sé. —Respondió. —me veo patético ante muchos, ante Kitty y Mochy.

—Ellos no te ven así. —Negó Yoongi.

—Si lo hacen. —Sintió sus ojos picar. —y me alegrará mucho verlos muertos.