Estrategias y Tentaciones

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Pov: Taylor

El reloj en la pared marca las diez de la mañana, y ya he tenido tres reuniones, dos conferencias telefónicas, y revisado un sinfín de documentos. Los días en la mansión son interminables, pero no me importa; mantenerme ocupada es una forma de mantener mi mente enfocada, lejos de pensamientos que podrían distraerme.

Mi equipo y yo estamos en medio de una negociación para adquirir un hotel en Singapur, una jugada estratégica que podría consolidar nuestra posición en el mercado asiático. Aun así, por más que trate de concentrarme en los detalles del acuerdo, mi mente se desvía a otra parte. A una mujer en particular.

Casey.

Han pasado tres días desde que le conté mi plan, y no puedo evitar preguntarme cómo lo estará asimilando. Sé que dejé una fuerte impresión en ella, y aunque trato de mantener la distancia para no agobiarla, también me resulta imposible no observarla cuando está con Alex. Cada sonrisa, cada risa, cada pequeño gesto me hace cuestionar lo que estoy haciendo. Pero al mismo tiempo, me siento atraída por esa conexión que parece crecer entre nosotros, casi sin darnos cuenta.

Dejé una flor en su puerta esta mañana, como lo he hecho cada día desde nuestra conversación. Un pequeño gesto para mostrarle que estoy tratando de acercarme, de demostrarle que, a pesar de todo, mis intenciones son genuinas. Por más que esta situación me confunda, no puedo negar que me siento extrañamente feliz al verla en la mansión, compartiendo momentos con su hijo. Es como si, por primera vez en mucho tiempo, este lugar se sintiera más... cálido. Más como un hogar.

Sacudo esos pensamientos de mi mente y vuelvo a enfocarme en la pantalla del ordenador. La reunión virtual continúa, pero apenas estoy prestando atención cuando mi teléfono vibra sobre la mesa. Es un mensaje de Amelia, una mujer con la que he salido un par de veces en el pasado.

**Amelia:** *¿Cenamos esta noche? Conozco un lugar que te encantará.*

Me quedo mirando el mensaje por un momento, considerando mis opciones. Hace tiempo que no tengo una noche de diversión despreocupada. Desde que Casey y Alex llegaron a mi vida, no he estado con nadie más. He estado demasiado concentrada en mi plan, en ellos, en lo que significa todo esto para mí. Pero Amelia... Amelia es sencilla. Con ella, todo es fácil. Sé exactamente lo que quiere, y no hay confusión en nuestras interacciones.

Tal vez eso es justo lo que necesito ahora. Un escape. Algo que me permita desconectar de esta creciente tensión dentro de mí.

**Taylor:** *Me parece bien. Paso por ti a las ocho.*

Mando el mensaje antes de que pueda arrepentirme y cierro la laptop. No puedo permitirme perder el enfoque ahora, especialmente con Casey en la mansión. Sin embargo, algo en su presencia me altera, me desconcentra, y necesito recuperar el control. Salir con Amelia es una forma de recordarme a mí misma que sigo siendo la misma Taylor Morgan, la que no se deja llevar por emociones ni conexiones personales.

A medida que avanza el día, intento sumergirme en mis responsabilidades. Hablo con los gerentes de mis otros hoteles, reviso informes, hago un par de llamadas para asegurar que todo esté en orden. Todo parece funcionar perfectamente, como siempre. Y, sin embargo, una parte de mí no deja de pensar en la mansión, en Casey, en su hijo.

Me sorprende lo mucho que me preocupa cómo Alex está asimilando todo. Es un niño, y aunque parece estar adaptándose, sé que su vida ha cambiado drásticamente. Pero, por extraño que parezca, siento un impulso de protegerlo, de asegurarme de que esté feliz aquí. Lo veo explorar la casa con esa curiosidad infantil, y no puedo evitar sonreír.

Mi teléfono vuelve a vibrar. Otro mensaje de Amelia, confirmando nuestra cita. Siento una extraña mezcla de emociones, pero sé que necesito esa distracción. Será solo una cena, una forma de recordar que, aunque todo esto me esté afectando más de lo que esperaba, sigo siendo quien siempre he sido.

La noche llega, y mientras me preparo para salir, no puedo dejar de pensar en Casey. La tensión entre nosotras es innegable, pero también lo es la confusión que siento cada vez que nuestras miradas se cruzan. Aun así, tengo que mantener las cosas bajo control. Esta noche, con Amelia, será una buena manera de reencontrar mi equilibrio. De recordar que, a pesar de todo, mi vida sigue siendo mía.

Lo que sea que esté pasando con Casey... lo resolveré. A su debido tiempo. Ahora mismo, necesito un respiro. Un recordatorio de que todavía soy Taylor Morgan, la mujer que siempre obtiene lo que quiere. Y esta noche, lo que quiero es olvidar, aunque sea por unas horas.

AUTORA:
Amelia ya me caes mal 😒

DANGEROUS LOVE Donde viven las historias. Descúbrelo ahora