DANGEROUS LOVE

Estrategias y Jugadas Maestras

POV Taylor

El aire dentro de la mansión se sentía denso, cargado de esa clase de tensión que solo aparece cuando sabes que algo malo está por suceder. Novak estaba vigilándonos, estudiando cada movimiento. Sabía que él no se arriesgaría a un ataque frontal sin tener una ventaja. No, su estilo era diferente: prefería jugar desde las sombras, apretando los lazos hasta asfixiar lentamente a su presa. Era un estratega, igual que yo.

Pero si pensaba que podría superarme, estaba muy equivocado.

Me encontraba en la sala de planificación, frente a una mesa larga llena de mapas, planos y documentos, tratando de adelantármele. Debía ser más rápida, más calculadora, y sobre todo, proteger lo que ahora se había vuelto mi prioridad: Casey y Alex.

Con un suspiro, tomé una copa de whisky y la llevé a mis labios, intentando calmar los nervios mientras miraba los esquemas de seguridad de la mansión y de mis propiedades. Teníamos cámaras, sensores de movimiento, hombres armados en cada punto estratégico... pero sabía que Novak no iría por la vía directa. Él siempre había preferido los ataques quirúrgicos, pequeños golpes aquí y allá para debilitarme antes de lanzar un ataque más grande.

—Estamos preparados —dijo uno de mis jefes de seguridad, un hombre de confianza que había estado conmigo durante años—. Tenemos vigilancia las 24 horas del día. Nadie podrá acercarse sin que lo sepamos.

Asentí, aunque sabía que la seguridad nunca era suficiente con alguien como Novak. Él encontraría una forma de entrar, siempre lo hacía.

—No es solo la mansión lo que me preocupa —respondí, dejando la copa sobre la mesa—. Novak no solo va a ir por mí. Va a intentar desestabilizar mi imperio desde las bases. Necesitamos reforzar la seguridad en los hoteles, las propiedades clave y todos nuestros almacenes. Novak no se detendrá hasta que encuentre un punto débil.

El jefe de seguridad asintió, pero antes de que pudiera decir algo más, la puerta se abrió y Casey entró en la sala. Su presencia trajo consigo una calma momentánea, pero también una especie de energía contenida. Sabía que ella estaba acostumbrada a lidiar con criminales, pero Novak era diferente.

—¿Tienes un plan? —preguntó directamente, cruzando los brazos mientras observaba los documentos sobre la mesa.

—Estoy trabajando en ello —respondí—, pero Novak es impredecible. Sabemos que está cerca, pero no sabemos cuál será su primer movimiento. Mi red de contactos me ha informado que ha estado moviendo recursos, pero no sabemos dónde va a golpear primero.

Casey frunció el ceño, su mente claramente en modo de análisis.

—Necesitamos estar por delante de él —dijo, su tono serio y firme—. Si Novak ya está vigilando, significa que está en la fase de recopilación de información. No atacará sin un plan completo. Y si estamos a tiempo, podríamos dar el golpe primero.

Era esa determinación lo que me atraía de Casey. Incluso en medio de este caos, su mente estaba enfocada en el peligro y en cómo neutralizarlo.

—¿Tienes algo en mente? —pregunté, inclinándome hacia adelante. Sabía que, aunque ella no estuviera en activo como policía, su instinto seguía siendo afilado.

Casey se acercó a la mesa, observando los planos de la mansión y de las demás propiedades.

—Necesitamos adelantarnos a él con una trampa —dijo—. Novak espera que lo vigilemos, pero no sabe cuánto sabemos. Si logramos hacerle creer que bajamos la guardia, podríamos forzar su mano y obligarlo a actuar antes de que esté listo.

Una trampa. Era arriesgado, pero también sabía que Casey tenía razón. Novak se sentía confiado, y si podíamos jugar con esa confianza, podríamos sacarlo a la luz.