Estrella reluciente. [⭐] Jin y Tú.

Capítulo 2.

En la gran empresa de entrenamiento de idols más grande en la ciudad estrella era la Musical, en las bambalinas de los idols que todos conocen estaban los movimientos de grandes empleados, quien hacían de la música un sueño realidad para todo tipo de público, llegando su debut desde muy temprano tiempo de la empresa preparando a sus artistas que ahora son conocidos por todo el mundo.

El trabajar en aquel lugar era el sueño como cualquier fan, uno en el que uno no deseaba ___ al llegar en el gran edificio escuchando millones de normas de la empresa, con ello los personales encargados de hacer tirar a tu persona en la borda si revelaba información circunstancias y claramente prohibida.

Era el momento para tener un trabajo, entendía las señales estando pronto a la estación de invierno, aun siendo presentada ante la empresa como una nueva trabajadora mostro rápidamente agilidad a su tarea limpiando la sala con el resto de personal y encargándose a las necesidades que podría tener un miembro de la agrupación.

−Oye, ___. Quiero un café americano caliente, con leche y mucha azúcar, hielo y sin vainilla −Ordena Taehyung en la burla de su amiga–. También quiero un sándwich de pollo y un filete en término medio, y unas papitas. Gracias.

−Joven Kim, esta siendo muy grosero con la nueva empleada del staff −Reclama la maquillista sin importar la mirada narcisista de Taehyung−. Señorita, lamento las molestias, el resto del staff sabe dónde conseguir el pedido.

Taehyung quien reía a su amiga quien se encontraba dando botellas de agua, ella rodaba los ojos tras saber que en su pijama obligatoria del día de ayer habían visto como película "El diablo viste a la moda" Por lo que Taehyung avisándole con tiempo le decía que seria tratada así y que aprovecharía al máximo al tener a su amiga como esclava personal.

− ¡Ay! ¡Está frio! −Reclama Taehyung sintiendo la botella helada pegada en su mejilla– ¡Oye!

___ deja la botella al tocador es quien se mueve rápido, teniendo que llamar por un pedido en la empresa, durante la sesión de fotos que tendrían los artistas, se toma su tiempo hasta llegar la comida, preparando en una bandeja hasta ofrecerla a Taehyung. Era el mismo de su edad quien reía, ofreciendo la carne a ___ quien niega un bocado antes de su descanso.

−Oye. ¿A dónde vas? ¿Dónde están mis papitas?...

Entre la bolsa de comida es quien entrega a Taehyung las papas fritas, aunque el niega molestándola de nuevo.

−No, no. Yo pedí de la maquina expendedora.

La intención de Taehyung era que soltara al menos otra palabra de su boca, inclusive causar humor a la situación ve a ___ con intenciones de ser el café quien le dé la lección, pero riendo Taehyung se marcha con la maquillista, volviendo a la sesión y huyendo de ___.

−Señorita Min, ya es hora de su descanso. Puede volver en media hora...

Agradeciendo con una mini reverencia sale del camerino de Taehyung, aunque viendo la comida sin tocar de su bribón amigo es quien se centra en guardar, para después pueda comer Taehyung. Saliendo junto alguna de sus pertenencias va en busca de la maquina expendedora, sabiendo que podría optar por la cafetería aguarda a un lado de la maquina recargada a ella mientras come lo que trajo de casa.

Ya antes había entrado a la cafetería y por supuesto que era helado, pero a un lado de una maquina expendedora en una de las paredes siempre encontraría calor y que se aclimataría, aun terminando su comida ingresa parte de su dinero, viendo las papitas favoritas de Taehyung, presiona uno de los botones saliendo de él, un refresco en lata.

−Te odio, maquina...

Para un edificio que lleva años vigentes, eran para ___ sus peores enemigos la maquinas expendedora, teniendo que poner un código en la pantalla, aun sabiendo que había pequeños letreros borrosos, intentaba moneda tras billete sin encontrar que secuencia apretar para las papitas de Taehyung, eso hasta llegar el joven a teclear.

− ¿Eso era lo que querías?...

–Si, gracias...

Jin había querido ir al baño viendo de regreso a la menor quien batallaba con la maquina expendedora, aun cuando llegan las papitas con ya varias cosas de la maquina en su bolso, es ella quien se le iluminan los ojos al recibir ayuda, eso hasta ver que se trataba del idol.

−Las maquinas de nuestra empresa ya son viejas, la mayoría ya se saben de memoria los códigos o buscan la tabla de precios −Menciona él, mostrando su celular−. ¿Quieres pasarme tu número para enviarte la tabla?

Ella asiente, siendo quien busque su celular en su bolsillo es quien copia el numero de Seok Jin, siendo el de hombros anchos quien vea la pantalla algo rota aun preguntándose como ha estado sobreviviendo ese celular que apenas calcula el toque de la pantalla.

___ guarda su celular, viendo la sonrisa cordial del joven es quien agradece con palabras, sino ofreciendo unas galletas y un té helado en lata quien deja en las manos de Jin, para sin más marcharse tras una reverencia.

Jin sonríe dulcemente recordando aquella vez repetirse nuevamente, aun siendo quien siga la menor detrás al caminar al mismo rumbo vuelven a la misma sala. siendo ___ quien regrese al camerino de Taehyung para llevarle sus papitas, siendo la mueca de Taehyung que dice todo.

−Hmm. Ya no se me antojan las papitas de marisco, quiero mejor las picantes.

Aclama Taehyung sentado en la pequeña sala, antes de que pueda ___ vaciar su bolsa de bocadillos que compro con error encima de Taehyung, es Jin quien estira su mano para quitarle las papitas, Taehyung queda viendo hasta notar al joven quien muestra en una mano el estofado que pidió.

− ¿Ya se te olvido que estás a dieta? ¿Sabes que está prohibido pedir comida rápida y chatarra?

−Yo se lo dije. −Comenta la maquillista en una esquina.

−Jin, solamente es un bocadillo.

Sin saber Taehyung que había cometido su cometido era Jin quien lo acusaba con uno de sus superiores, recibiendo la reprimenda de siempre de controlar su peso, era ___ quien inconsciente sonreía siendo quizás justicia divina la que se esté de su lado.