Capítulo #7

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Esa mañana, Jackson se sentó en su oficina, revisando los documentos y presentaciones que había preparado para la junta directiva. Sonrió para sí mismo, satisfecho con el trabajo que había hecho. Todo estaba listo para que Bambam tomará el control de la junta, y Marco no sospechaba nada.

Procuró adjuntar las fotografías y notas en el documento, asegurándose de que todo estuviera en orden. Las imágenes mostraban a Lisa con diferentes mujeres en citas románticas. La última fotografía, en particular, era incriminatoria: Lisa aparecía ebria, abrazada de Nayeon, la modelo conocida por su escandalosa vida personal.

Jackson sonrió para sí mismo, satisfecho con el trabajo que había hecho. Estaba seguro de que este documento sería el golpe final para Lisa. La junta directiva no podría ignorar esta evidencia, y Bambam tomaría lo que le correspondía, cerró su portátil con una sensación de satisfacción, listo para empezar a poner en marcha su plan. Se levantó de su asiento y caminó hacia la barra personal que había en su oficina, donde guardaba una selección de whiskies y licores de alta calidad.

Se sirvió un trago de su whisky favorito y lo bebió con placer, saboreando el sabor ahumado y la suavidad del líquido dorado. Mientras bebía, se sintió confiado y seguro de sí mismo, sabiendo que pronto lograría su objetivo. Con el trago en la mano, se acercó a la ventana de su oficina y miró hacia afuera, contemplando la ciudad que se extendía ante él. Se sentía como un rey en su trono, listo para dar el golpe final.

Jackson recibió una llamada en su teléfono, miró la pantalla y vio el nombre de Bambam parpadeando. Contestó la llamada con una sensación de anticipación.

— ¿Sí? ¿Bambam? — respondió Jackson.

¿Está todo listo? — preguntó Bambam al otro lado de la línea.

Jackson sonrió para sí mismo, sabiendo que el plan estaba en marcha.

— Sí, todo está listo — respondió con confianza. — Los documentos están preparados, las pruebas están en orden. Solo estamos esperando el momento adecuado para presentarlas.

Excelente — dijo Bambam. — Quiero que sepas que estoy contando contigo para que esto salga bien.

— No te preocupes, Bambam — dijo Jackson. — Estoy comprometido con esto. Lisa no tiene idea de lo que se viene.

La llamada terminó con un tono de determinación. Jackson colgó el teléfono, sabiendo que el destino de Lisa estaba sellado.

Marco Brüschweiler, tío de Bambam, padre de Marco y Lisa, había tomado una decisión que cambió el curso de los eventos. A pesar de que Jackson había trabajado arduamente para obtener el puesto, se lo otorgó a Lisa, dejando a Jackson con una sensación de frustración y resentimiento. Tras la decisión se sintió traicionado y decepcionado, creyendo que había sido injustamente pasado por alto. En lugar de aceptar la decisión, decidió unirse a Bambam en su plan para deshacerse de Lisa de una vez por todas.

Con una sonrisa amarga, Jackson pensó: "Ahora es el momento de que Lisa pague por lo que me hizo". Se sentía decidido a ayudar a Bambam a llevar a cabo su plan, sin importar las consecuencias.

La verdad detrás de la decisión del tío de Bambam comenzaba a revelarse. A pesar de las creencias de Jackson, Lisa había obtenido el puesto gracias a sus propias aptitudes y habilidades. Ella poseía las cualidades necesarias para desempeñar el rol con excelencia, y su perfil encajaba perfectamente con lo que se buscaba.

Sin embargo, Jackson se negaba a admitir la derrota. En su mente, la decisión había sido un error, un acto de favoritismo hacia Lisa. No podía aceptar que alguien más fuera mejor que él, especialmente no Lisa, a quien veía como una rival.

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