Cuando llegaron, su padre estaba sentado en su escritorio, su madre en uno de los muebles de la habitación con las piernas cruzadas y el rostro gacho, el ambiente estaba tenso. A un lado estaba Lila, quien forma parte del consejo en la manada... Pero al otro lado de la habitación, la chica de cabello rizado y ojos grises que había visto en la habitación donde estaba Gian aquella vez.
Su padre exhaló y se frotó la cara.
—Ámbar—juntó sus manos sobre el escritorio—, dime por amor a las Diosas Lunas... ¿Qué has hecho? y no me mientas por favor—afincó su barbilla sobre sus manos.
Todas las miradas cayeron sobre ella. April había salido y cerrado la puerta, estaba sola de nuevo, sin el apoyo de sus padres o de algún amigo. Quería salir corriendo de allí, tomar la mano de Gian y escapar de ese lugar, descubrir un mundo donde ambos pudieran ser felices.
—Ámbar...—ésta vez su madre habló, con tristeza y la voz quebrada—¿Por qué lo hiciste?. ¿Te obligó?...
Diosas, estaba entre la espada y la pared, qué iba a decir.
—Las Diosas...—se sobresaltó.
Su padre se levantó y golpeó la mesa.
—No las metas en esto—gruño y la señaló—. Da una lógica respuesta para que te crea y te entienda Ámbar.
Los labios de la castaña empezaron a temblar.
—Papá yo... Sé que las Lunas nos unieron—enderezó la postura—. Y no voy a ser la mate de Dany—sentenció.
—¿Eso crees?, ¿qué las Lunas te unieron a él?—bufó.
—No no lo creo... Es—un golpe sobre la madera le cortó el habla.
—Lila—la interrumpió Tomy—, comprueba quién es el chico por favor—ordenó.
La anciana se acercó a Ámbar, de una extraña forma la dejó inmóvil. Ámbar intentó desesperadamente hacer reaccionar a su cuerpo, pero este no respondió.
Lila bajó el pantalón junto a la ropa interior de la castaña, dejándola completamente desnuda... Una lágrima cayó del rostro de Ámbar cuando la anciana introdujo un dedo dentro de su intimidad... Se sintió indignada, jamás pensó que su padre llegaría tan lejos, era el ser más repugnante en la vida.
Ahora lo odiaba.
—No está marcada, pero es evidente que la chica no solo ha estado con Dany—informó Lila.
Tomy tapó su rostro y su respiración estaba alterada.
—Eso ya lo sabemos Lila—hizo un ademán—, lo que no sabemos es quién es el macho que se la está follando.
El hechizo se deshizo y Ámbar se tumbó en el suelo quedando sobre sus rodillas, abrazándose y tapando su cuerpo.
La anciana hizo algo con sus manos, los padres de Ámbar esperaban por las respuestas, hasta que...
—Ni siquiera es un Alpha...—habló la anciana—. Además parece ser...—hizo una pausa, dándose cuenta de todo—El chico que trajeron de la manada Dark, Gian. El mismo al que usted mandó, que tuviese cuidados especiales en su Celo—compartió una mirada con Tomy.
—Jamás pensé—Tomy estaba sorprendido, con sus manos desordenó su cabello—... Que fuese capaz.
Linda se acercó a Ámbar, su rostro humedecido miró los ojos de su madre, que destilaban todo menos cariño...
El rostro de Ámbar giró cuando su madre la abofeteó, la castaña no pudo evitar derramar más lágrimas.
—Me das asco—se tapó la cara y se alejó de allí—. Ese bastardo...
Ámbar ya estaba harta, harta de tener que ser la chica correcta que hacía todo bien por complacer a su padres. Todo esto lo iba a mandar a la mierda, después de todo, las Lunas habían elegido a Gian como su compañero y ella lo había aceptado. Lo que dijeran sus padres ya no importaba, no después de ésto.
—Lo marqué—dijo sosteniendo el lugar donde su madre la había golpeado—. Las Lunas decidieron unirnos... Traté de oponerme pero...
—¡Cállate!—vociferó Tomy—. Te he dicho que no las metas en esto—se acercó a Ámbar—. Costará, pero voy a romper ese maldito Lazo, así tenga que matar a ese mal nacido—su respiración acelerada—. Después de todo lo que hice por él...—frota el puente de su nariz.
Ámbar se puso de pie y encaró a su padre.
—Yo no quiero romper ningún Lazo—vió a su madre—. Mamá... En verdad lo siento—sus lágrimas empezaron a caer—. Pero no aceptaré casarme con otro hombre que no sea Gian, lo amo y no me importa si ustedes lo aceptan o no—su mirada desafiante—, voy a ser su mate.
Linda se sentó y tapó su rostro, mientras sus ojos se convertían en cristales que se desquebrajaban en forma de lágrima.
—Quiero ser feliz—dijo Ámbar y se topó con la mirada gris de la morena—. Esto lo hiciste tú, pero me importa un carajo—la señaló—, nada cambiará lo que siento por Gian—volvió su vista a su padre—. Me importa una mierda lo que ella te haya dicho.
La mujer sonrió.
—Ha Sido un placer conocerte en persona—ladeó la cabeza—, princesa.
—Debería importarte—dijo su padre agresivo—, Gian iba a ser el compañero de Tiana por haberte cuidado, para eso lo trajimos y pensar que lo ofrecí dos hembras—rió con sarcasmo—. Qué irónico ¿no?—negó—. Pero ahora lo haré pagar con mis propias manos por haberse metido con mi familia, ha deshonrado a nuestra manada.
—Para acabar con él debes acabar conmigo—su mirada fija a la oscura mirada de su padre—. Ya no voy a hacer lo que me pidas papá, no pertenezco a tu ridícula manada—su mandíbula temblaba—, ¡tú y toda tu maldita manada váyanse al carajo!.
Las cejas de Tomy se alzaron y de manera inconsciente golpeó a palma abierta el rostro de su hija...
—¡Tomy!—gritó Linda mientras se apresuraba a abrazar a su hija, que había caído inconsciente en el suelo—. Ámbar—la llamó con lágrimas en sus ojos—, mi niña...—la abrazó contra su cuerpo y vió a Tomy—. ¿Por qué la golpeaste?.
—Disculpa, perdí los estribos. Pero está mejor así—se dió la vuelta—. Quédate con ella.
Se acercó a la puerta y salió, detrás de él salió Tiana y Lila.
—Soy una estúpida—lloró—. No quiero que te pase lo mismo, perdóname—sorbió los mocos—. Mi pequeña Luna...—la apretó más contra su pecho—. No tendrás el mismo destino que yo—sus ojos y mejillas bañados en lágrimas—, te lo prometo.
ESTÁS LEYENDO
El Celo de Una Luna(Disponible En Dreame)
WerwolfLas tres Lunas llenas se acercaban, el cambio de forma junto al Celo de una futura Luna estaban a punto de llegar... Pero las Diosas Lunas tenían un destino preparado para Ámbar, quien iba a ser entregada como Mate a Dany, hijo del Alfa Asher. Este...