El Celo de Una Luna(Disponible En Dreame)

07: Ámbar.

Ámbar había pensado en entrar a bañarse con Gian, era algo que quería hacer desde anoche. Aunque no sabía de que forma iba a reaccionar el moreno, pero no se sacaba de la cabeza la idea de seguir compartiendo bellos momentos con Gian y sobre todo, de volver a estar con él... Por alguna razón, desde que Gian despertó Ámbar quería volver a estar con él, su olor se había impregnado en todo su cuerpo. El Celo de Ámbar ya se había calmado, por eso no se explicaba las repentinas ganas de estar con Gian, así que simplemente pensó que así se sentía querer a otra persona.

Se quitó la poca ropa que tenía y se envolvió en una toalla, se recogió el cabello y se acercó a la puerta del baño. Cuando estuvo en frente, dudó en entrar... ¿Y si Gian no quería seguir teniendo sexo?, ¿Y si todo lo que hizo anoche lo hizo por ella estar en Celo?... No, si fuese así, la habría evitado después de haber estado juntos, en cambio decidió compartir la cama con ella. Aunque no era gran cosa.

La puerta se abrió repentinamente, dejando a Ámbar parada como una estatua. Gian se sorprendió al verla frente al baño, se notó en su expresión y en cómo sus ojos comenzaron a evaluar la figura de Ámbar, deteniéndose en su mirada. Ámbar quedó estática, no sabía si decir algo o quedarse callada, ya que era algo obvio lo que ella iba a ser... Por un momento se imaginó a Gian sonriendo y pidiéndole que entrase con él al baño, verlo casi desnudo desató pensamientos lujuriosos. Se imaginó estando de espaldas a él, embistiendola con desenfreno, pero en cambio...

-El baño está libre-dijo Gian con su habitual tono seco.

Ámbar se sintió estúpida, cómo pudo pensar en que Gian la invitaría a pasar y bañarse con él, ¿qué carajos pasaba por su cabeza?.

-Vale-Ámbar habló mientras asentía repetidas veces.

No iba a decir nada más, eso era suficiente.

Luego Gian Sin decir nada más y apartando su mirada se fué a vestir. Dejando a Ámbar en un trance, dónde se debatía qué estaba pensando y qué estuvo a punto de hacer. De pronto se sintió enojada, llena de odió.

Pero ella no se demostraba indiferente hacia él, Sin embargo... ¿Cómo podía ser tan frío?. Después de todo lo que habían hecho, ¿Cómo podía ser tan indiferente?... Esperaba que dijera algo, no que le confesara amor eterno ni nada, pero al menos podía haber dicho... No sé, algo... ¿Lindo?.

A veces le incomodaba que Gian hiciera como si ella no existiera. Y ahora más, después de lo de anoche. Entró en la ducha y abrió la llave, el agua empapó su delgado y esbelto cuerpo, sus senos no eran muy grandes, su abdomen plano, sus anchas caderas y sus hermosas y alargadas piernas. Recordó como Gian apretaba su trasero y se le fué imposible no llevar sus manos hacia esa zona... Un gemido salió de ella al presionar sus uñas sobre sus nalgas y recordar el tacto de Gian, y más aún, cuando un olor a cedro y canela invadió su nariz... El olor era más fuerte de lo habitual, era el peculiar olor que emanaba Gian, así que pensó que él estaba dentro del baño, por un momento pensó en que Gian no podía ser tan frío y que había decidido acompañarla, miró fuera de la ducha pero estaba sola.

Y se volvió a sumir otra vez en sus pensamientos airosos. Ahora pensaba en ignorarlo y dejar que él sea quien venga a ella para hablar.

Pero después se dió cuenta, de que Gian no estaba acostumbrado a hablar con la gente... Entonces, no podía ser tan egoísta como para no hablarle, además de que ella sea la única persona con la que él habla. Así que se convenció de hacer lo posible para conocerlo mejor, ya se las iba a arreglar para lidiar con sus padres... Aunque era algo imposible y era mejor hacer quedar a Gian como si fuera simplemente un amigo, por que si su padre se llegara a enterar de lo que hicieron, definitivamente no sabría qué la pasaría a ella y a Gian.

Pero fuese en secreto o como fuese, Ámbar quería saber más sobre Gian. Quería entender qué era esto que él la hacía sentir.

***

Ámbar había terminado su última clase del día y de Gian solo tenía el vago recuerdo de su olor... Y las marcas que había dejado en su piel.

Salió temprano, y por segunda vez y más decidida quiso ir en busca de su primo para hablar con el e ir juntos a comer y luego a su habitación. Al llegar al salón donde Gian recibía clases, se dió cuenta de que él ya no estaba allí. Entonces fue por algo de comer y luego su cuarto, pero tampoco se lo encontró ahí y lo más extraño aún, su habitación no estaba vacía... Su madre estaba allí.

-Hola mamá-saludó un poco incómoda por el desastre en su cama.

La mujer de cabello azabache se levantó del puff donde estaba sentada y abrazó a su hija, el gesto confundió a Ámbar.

-Hola mi niña-sus manos quedaron sobre los hombros de Ámbar y sus ojos ámbar puestos sobre los de su hija-¿Estás bien?.

La nota de preocupación, la inquietud de su madre y la forma en que la miraba llenaron a Ámbar de incertidumbre.

-¿Sucede algo mamá?-inquirió.

La mujer analizó el rostro de Ámbar, buscando algún rastro de inquietud e incomodidad o algo que afirmaran sus sospechas. Pero no encontró nada, así que se calmó. Después de todo al parecer estaba bien.

-Solo una cosa ha pasado y no es de tal importancia-hizo un gesto con su mano, iba a seguir cuando... Algo en la mente de Ámbar hizo click... ¡Sus gemidos se escucharon hasta en el patio del Instituto!, no solo eso sí no que también sus chillidos y los gruñidos de Gian. Ay por amor a Las Lunas. Ámbar se quedó sin palabras, quieta y llena de miedo por lo que su madre le iba a decir.

-Gian entró en Celo y pensamos que fué desde anoche, así que quise venir a ver si te había hecho algo-hizo una pausa y soltó aire-, pero veo que estás bien.

Ámbar volvió a respirar, algo aliviada. Al menos por ahora.

Pero ahora sentía curiosidad por saber dónde estaba Gian y que habían hecho con él.

-¿Y que le han hecho?.

-He hablado con tu padre para que le entregué una Omega y apacigüe su Celo, aunque es muy poco probable-se encogió de hombros-. Es un Sigma, pero ya después podrás hablar con él, he visto que se han vuelto muy unidos. Pero por ahora estará lejos de tí, tienes que estar pura para que seas entregada al hijo de Asher.

Miren, lo que les dije XD. Este es uno de los cap de la otra versión de la historia🤗, complemento del cap seis, así que espero les guste. Deja tu voto, comparte y sígueme para la segunda parte😌.

Gracias por leerme🌹