Primer día de alta, fue una locura. Nada más salir del hospital y tras un enorme sermón por parte del médico sobre mis horas de descanso y el necesitado reposo absoluto, pudimos irnos.El señor Min y Woozi se habían encargado de prepararnos un apartamento en el centro del campus, a menos de cinco minutos del edificio donde ambos tenemos las clases.
Mi padre fue el que nos trajo al edificio, Yoongi les había pedido a sus hermanos que no les dijera a nadie que ya nos habían dado el alta. Lo que menos queríamos es que encima nos agobien el primer día fuera del hospital.
Yoongi llevaba a la pequeña en su mecedora de coche, mi padre nos la había regalado. Yo caminaba a su lado mientras entrábamos en ese edificio reservado para profesores. Me sorprendió ver lo lujoso que era, los profesores no viven nada mal, en este campus.
Subimos hasta el séptimo piso y en ese pasillo solo había dos puertas, la nuestra era la B. Séptimo B. La puerta se abría con código, yo aún no me lo sabía. Pero tampoco iba a salir de casa por el momento. Al abrir la puerta me sorprendí bastante con la cantidad de espacio que había.
La cocina era abierta y la separaba una barra americana, del salón. Sería bastante práctico para nosotros dos. Lo bueno es que contábamos con tres habitaciones, pero solo un baño. Una de las habitaciones estaba preparada para la bebé, con todos los muebles necesarios para ella. Se notaba demasiado que el señor Min había tenido que ver, por la cantidad de cosas rosas que había ahí.
No creo que a la pequeña Min le agrade mucho el rosa barbie, pero tampoco creo que le importe en estos momentos. Luego estaba la habitación principal, con vestidor incluido y otra habitación que hacía de despacho, pero con sofá cama.
—- Por ahora hay una cuna en la habitación principal, por si es más cómodo dejar a Songi. Yo si quieres puedo instalarme en el sofá de invitados.
—- Yoon hemos dormido juntos demasiadas veces, además necesitare ayuda con esa chillona.
No había visto bebé más chillón y ruidoso que Min Songi, todo lo que tenía de pequeña, también lo tenía de mala leche. Se pasaba el día comiendo y berreando.
Por suerte ahora dormía y no íbamos a moverla de esa mecedora de viaje. Me dejé caer en el sofá, notando lo cómodo que era este. Terminé odiando la camilla del hospital, era demasiado incómoda.
—- Debería preparar algo de comer, según Woozi han hecho una gran compra.
—- Aún es pronto, solo siéntate y descansa ahora que esa chillona está dormida.
Él soltó un suspiro cansado, antes de sentarse en el sillón individual.
—- ¡Dios esta cosa es el puto cielo! —exclamó, cerrando sus ojos y uniéndose en el sillón.
No pude evitar reír, ese sillón es para mamás, cuando dan el pecho.
—- Yoon es un sillón para dar el pecho, por eso es tan cómodo.
ESTÁS LEYENDO
Ladrón de bragas +18
HumorLena una joven de apenas veinticuatro años, se muda a un barrio residencial tras matricularse en la universidad de Seúl. la joven tras pensarlo mucho, alquilo una habitación en una de esas casas residenciales. Se podría decir que era un barrio de c...