CHIARA
Mi vida es una completa y auténtica mierda que se ha venido abajo en los últimos días. Tanto tiempo luchando con la enfermedad de mi madre y ahora todo ha terminado. Me he quedado sin ella y encima sola, sin amigos, sin Dean ni Rob. Necesito que me dejen sola de una vez para poder llorar. Pero con toda la gente delante es imposible. Tengo un vacío en el estómago que me impide comer y una presión en el pecho que no me deja respirar.
Quiero escribir a mis amigos y poder hablar con Dean. No me han dejado despedirme de ellos ni de la familia de Rob. Me queda casi un año para poder volver. El idiota de Marco me interrumpió cuando iba a acostarme con Dean. Iba a ser nuestra primera vez, se lo quería regalar como despedida. Llevábamos apenas unos meses y con la enfermedad de mi madre no habíamos podido estar juntos de esa manera. Pero gracias a Marco seguía siendo virgen.
- ¿Cómo estás?, sentimos mucho lo de tu madre. - Giulia me mira con ternura
- Bueno, supongo que aún no he procesado todo lo que me está pasando. Demasiados cambios en poco tiempo.
- Lo imaginamos, pero no te preocupes. Seremos buenas amigas. Tenemos un grupo de amigos y podemos salir juntos, si quieres. Además, iremos a la misma clase. Puedes ser mi compañera de pupitre. Nosotros cuidaremos de ti.
Los dos parecen bastante agradables y ellos no tienen la culpa de que mi padre sea un gilipollas sin sentimientos. Solo pensar en él me da escalofríos.
- ¿Tú también vendrás a mi clase? – Le pregunto a Salvatore. Esboza una sonrisa
- No, yo estudio en la universidad. Está aquí al lado.
- ¿Qué estudias?- Finanzas. Todos los hombres de la familia estudiamos eso o derecho. Siempre he tenido claro que derecho ni de coña
- ¿Pero te gusta?
- Eso da igual, necesitamos estudiar una de ellas para luego ocuparnos de los negocios de la familia. Cuando los mayores se jubilen me tocará a mi hacerlo. – Es lo más estúpido que he escuchado nunca.
- ¿Y si Giulia quiere ocuparse de los negocios de la familia? ¿o si tú quieres ser ... no se astronauta? - Ambos se ríen.
- Mi hermana puede estudiar lo que quiera y si quiere dedicarse a los negocios de la familia siempre es bien recibida al igual que tú, pero el hombre es el jefe y siendo el mayor con más derecho.- Bufo es un pensamiento tan machista que me está provocando urticaria pero acabo de llegar y si digo lo que pienso creo que Salvatore no se lo va a tomar bien. Desde luego no es el momento.
- Te dejamos para que descanses y deshagas las maletas. Te avisaremos para comer. Me encanta que por fin vaya a tener una amiga en la familia. Bienvenida Chiara. – Le sonrío. Giulia me cae muy bien. Salvatore también es simpático pero su forma de pensar me preocupa. Solo espero que no me digan que tengo que hacer por ser mujer.
Me tumbo en la cama y escribo al grupo de amigos. Después le mando un audio a Dean diciéndole lo que le echo de menos. Dejo el teléfono y por fin lloro. No sé durante cuánto tiempo lo hago, pero me despierta Alessia para que vaya a comer. Todos me esperan.
- Me alegra que tu madre te siguiera hablando en italiano, así será más fácil hablar contigo- Me dice Filippo. Nunca le he considerado mi padre, ese título solo lo tiene Rob.
- Mi madre nunca renunció a sus orígenes. No tenía porque avergonzarse de ser italiana.
No dice más. Mi tía mira todos mis movimientos con mala cara, está claro que no le gusta mi presencia-. Lo que no sé si sabe es que a mi tampoco me gusta la suya. No deja de preguntarme por cosas de Estados Unidos. Preguntas estúpidas como que, si sólo comemos hamburguesas, si sólo jugamos al fútbol americano, ... típicos clichés
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POR TODAS ESAS RAZONES
RomanceChiara acaba de perder a su madre y tiene que volver a Italia con un padre al que apenas conoce. Marco, es la mano derecha de éste. Frío, cruel y letal. Los problemas empiezan a surgir cuando Marco comienza a mirar a Chiara de una forma distinta a...