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Quédate un poco más que un para siempre.

Ya era el día de la feria, Quackity se estaba alistando al igual que rubius y vegetta.

R- Pato, ya estás?- Grito desde su habitación.

Q- Si!- Respondió dándose sus últimos retoques.

Quackity tenía unos shorts negros con líneas blancas a los costados, una hoodie azul que le quedaba un poco grande, debajo de esa hoodie traía una camiseta blanca, También traía un gorro del color de su short. Sus zapatillas eran blancas con unas medias blancas que sobresalían de sus zapatillas.

V- Pues vamos familia!- Dijo saliendo de su habitación para ir a la salida de la casa.

Vegetta ya consideraba a Quackity como su hijo, se había encariñado mucho con él en los días que había llegado. Cuando todos ya estaban encariñado el auto de Vegetta el cual era un deportivo de color morado oscuro, el Alfa era uno de los arquitectos más pagados del país.

V- Vale Quackity, las cosas son muy claras, no robes, no hagas ninguna ilegalidad, no molestar a absolutamente nadie.

Q- Verga, que más quieres?

R- Que no te comportes como un animal de granja- Dijo mirándose al espejo que tenía el coche, se estaba asegurando de que no se viera mal.

Q- Cállate pinche pendejo, aquí el animal eres tú!

V- Ostias quackity! Tu tienes una cola y alas de pato!- Dijo estresándose un poco

R- Tio, pareces un niño hiperactivo.

Q- Bueno, ya se que no me quieren- Dijo con un tono de voz de víctima totalmente falso, solo para dar lástima.

V- Claro que te queremos! pero también te queremos educar bien!

R- Eres como nuestro hijo.

Q- A poco? Tan ancianos están? Cuantos años tienes tu vegetta?

V- Nací el 1999.- Al escuchar eso quackity empezó a contar con sus dedos, desde el 1999 hasta el 2024.- Tengo 25 Quackity.- Dijo pero el pato lo ignoro y siguió contando, cosa que el oso y el pelinegro ignoraron y se quedaron callados escuchándolo.

Q- Tienes 15? No mames!

V- Si quackity, Si.- Dijo soltando un suspiro.

R- Tiene 25! animal de granja!

Quackity empezó a reír por sus malos cálculos, por suerte ya habían llegado a la feria y todos se bajaron, el pato tenía toda la cara roja y los ojos llorosos por la risa, el aire se la había ido y se la hacía casi imposible respirar por la risa.

R- Quackity, compórtate, te hacen faltas modales.

Q- Sabes que te hace falta a ti? Que te anexen.

R- Como? Pero bueno! a ti que te deporten!- Dijo dándole un codazo en el hombro al contrario, pero el híbrido de pato se estaba muriendo de la risa por la respuesta del de ojos verdes.

Nunca se había divertido así en su vida, el siempre se repetía la misma pregunta.

"¿Así estaría en Dsmp?"

Todas las noches quackity se quedaba con su teléfono, no podía dormir ya que tenía insomnio y en esas horas su cabeza se llenaba de preguntas.

Las mismas preguntas, las mismas respuestas de siempre.

Quackity no deseaba morir, solo deseaba haber tenido otra vida, no pensaba que todo lo que le había pasado era por un karma y que se lo merecía, siempre trata de echarse la culpa por todo lo que pasaba.

𝒪𝒿𝒶𝓁á || 𝓛𝓾𝓬𝓴𝓲𝓽𝔂Donde viven las historias. Descúbrelo ahora