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Llene de libros mi
habitación, perdiéndome
en historias que me hicieran olvidar
la mía.

Era un nuevo día, para otros un día normal pero para Quackity y Luzu era otro día sin sus caricias. Sin su amor. Quackity estaba despierto tirado en la cama viendo su telefono, estaba viendo redes sociales mientras pensaba sobre el y su vida, estaba pensando en que hacer o en que iba a pasar en el futuro con él y con Luzu. El y el castaño no habian hablado desde que Luzu ganó las elecciones, el pato no pensaba en escribirle, pensaba que el ojo color rubi estaba muy ocupado en la alcaldía de Karmaland, pero era todo lo contrario.

Luzu se encontraba en casi la misma situación que el azabache, El se encontraba tirado en un sillón en el ayuntamiento viendo de reojo su nueva oficina en la cual iba a estar 24/7, estaban ordenando y Luzu solo veía como sus asistentes iban acomodando todo al gusto de Luzu, el solo dictaba. Luzu sabía que si tenía que estar con Quackity no podía estar 24 horas todos los días a la semana ahí adentro.

Luzu en verdad extrañaba a Quackity.

Quacks

Hola Quacks.. Quisiera hablar contigo.
Te quiero explicar todo esto, por favor.

No cabron, no me busques.

Porfavor Quacks.. Te lo pido.
visto

Luzu suspiro con los ojos entristecidos y húmedos, apagó su telefono y siguió con su día, aún que no seria lo mismo.

Pasaron unas horas y Luzu al igual que Quackity estaban los dos aburridos, muy aburridos.

R- Vege, voy a ir con Quackity.

V- Deberías llevar a Luzu.

R- Para que? Quackity ve a ese gilipollas y se va a molestar demasiado.- Rubius negó con su cabeza- No lo lleves, no es lo correcto para el pato.

V- Yo si creo que es lo correcto, ve tu con el niño y yo luego llego con Luzu, ambos se necesitan.

Rubius sopló del cansancio, tener un hijo, un mejor amigo deprimido y en problemas y tener un novio terco todo junto, al mismo tiempo no es fácil.- Si Quackity te odia, ya sabrás por que es.

V- Luzu está mal al igual que Quackity, Doblas es por el bien de ellos dos.

R- Haz lo que quieras vegetita.- Dijo con un tono de voz anodino, dándole la espalda al mencionado, después de decir eso se fue.

Rubius iba por el pueblo, quería ver que nuevas instalaciones habría hecho Luzu y para Rubius "su asquerosa alcaldía.", incluso Rubius se adentró al Ayuntamiento.

As- Muy Buenas tardes, a quien busca?- Dijo un asistente que trabajaba en el ayuntamiento.

R- Solo quería ver.

As- Te podemos agendar un Tour con el alcalde Luzu.

Rubius al escuchar eso puso una cara de asco que no pudo disimular, Rubius no le caía tan bien Luzu y ahora que era alcalde lo detestaba más, para Rubius ser alcalde es algo muy cliché.

R- No gracias, adiós. - Dicho esto Rubius se retiró del establecimiento y fue a donde se ubicaba el pato.

Al llegar pudo ver que todas las persianas de esa casa estaban cerradas, así que adentro estaría oscuro como una cueva, aún asi el oso se acercó a la puerta y tocó un par de veces. Espero unos minutos y un azabache deprimido le abrió. El pato estaba en pijama, tenía unas ojeras enormes, como si no hubiera dormido en un mes. Tenía el pelo muy desordenado al igual que toda su casa.

𝒪𝒿𝒶𝓁á || 𝓛𝓾𝓬𝓴𝓲𝓽𝔂Donde viven las historias. Descúbrelo ahora