Oxímoron Negro (Jikookmin)

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Ya sentados en la oficina, los detectives esperaban información del laboratorio y se devanaban los sesos. 

A Jimin se le ocurrieron todo tipo de ideas de vez en cuando, las cuales Jungkook refutó hábilmente. Yoko guardó silencio y no escuchó en absoluto las acaloradas discusiones entre los chicos. Estaba completamente inmersa en su mundo y trató de encontrar incluso la pista más pequeña a la que pudiera agarrarse, pero su cabeza estaba vacía. 

El juego es demasiado complicado, hay muy pocas pruebas y testimonios. 

Al principio todo parecía muy sencillo: un hombre rechazado, dos chicas, una de las cuales le rompió el corazón, una discoteca en la que se hacía justicia, pero no... La situación era mucho más complicada. 

El asesino anda libre y se burla de aquellos atormentados por conjeturas. 

Hábilmente envió a alguien que asumió toda la culpa, pero ¿por qué? ¿Qué persona normal aceptaría representar una escena muy talentosa delante de todos y confesar asesinatos que no cometió? Oh, sí, normal... Yoko casi se olvida que el falso asesino se volvió loco después de lo que le hicieron en la cara. Esto significa que la persona que organizó todo esto tenía un plan determinado, tras el cual eligió a Gong Joon. 

- Creo, dijo Yoko en voz baja, rompiendo el silencio que había durado casi una hora, pero no se dio cuenta, "nuestro incógnito es un buen psicólogo. Era como si le permitiera a Joon desahogarse y vengarse de todas las mujeres mediante asesinatos menores de dos chicas". 

- ¿Y nos envió el tercero como regalo-pista? - preguntó Jimin, tomando un sorbo del café que se preparó recientemente. 

- Sí, la chica se levantó de la mesa y comenzó a caminar de esquina a esquina. 

El detective Park la observó atentamente, pero el detective Jeon frunció el ceño y hundió el rostro en la carpeta con el material, aunque no había nada más que buscar allí. 

- Me parece que esta serie de asesinatos ha terminado, pero esto significa...

- Esto significa que tenemos que esperar al siguiente, Jimin bajó la cabeza, tomó la taza caliente en sus manos y tomó un profundo aliento. 

Si Jungkook y Yoko estaban listos para analizar a fondo el caso poco a poco, entonces Jimin ya estaba cansado. Le dolía la herida reciente, irradiaba un dolor desagradable por todo el lado izquierdo, le zumbaba la cabeza y no había más ideas nuevas: todo lo que decía era rechazado y olvidado. 

Quería tumbarse en su cama favorita, leer un libro o mirar televisión. Simplemente relajarse como un ser humano. Aunque Jimin era un detective excepcional que, junto con su compañero, resolvía incluso los casos más complicados, en ocasiones era atacado por la tristeza más salvaje, acabando con toda su energía. Y si no fuera por la llamada de Taehyung, el detective se habría desmayado emocionalmente en su escritorio. 

- Estoy escuchando, respondió el detective Park. 

- Hemos establecido la identidad de la chica asesinada, respondió Kim Taehyung algo emocionado. Esta es la hermana de Gong Joon. Pero espera a que te sorprenda, Jimin, lo peor está por llegar... Estaba embarazada. 

- ¡¿Qué?! — Jimin levantó la voz, saltando de su silla. ¡No entiendo nada! 

- No sé si podremos descubrir quién fue el padre del niño... Será mejor que vayas a visitar a esta extraña familia. Anota la dirección.

Cuando afuera oscureció, cuando la fatiga se hizo aún más fuerte, Jimin se recostó en el asiento trasero del Audi, que corría hacia la dirección indicada para visitar a la familia Gong, y luchó desesperadamente contra los blues atacantes. La noticia de Taehyung lo animó, pero no por mucho tiempo.