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La casa en la que vivía Yoko no estaba diseñada para tres residentes, la niña apenas podía encontrar un lugar en ella, pero esa noche, cuando los detectives decidieron no dejarla desatendida, tuvo que trabajar duro para acomodar a los invitados. 

No podía dejarlos dormir en el suelo desnudo, por lo que  tendrían que sentarse en la misma cama que ella. El coche negro se detuvo cerca de una casa familiar. La misma zona desagradable y sucia, las mismas casas inclinadas, entre las que se encontraba una que pertenecía a Yoko. 

Jimin recordó rápidamente la dirección, porque ya habían estado aquí cuando se encontró el tercer cadáver de una chica con los ojos cortados, y fácilmente condujo hasta su destino. Está un poco lejos del trabajo, pero ¿Qué puedes hacer si está en juego la vida de otra persona? Aquí no te importa gastar gasolina, siempre y cuando la noche transcurra sin incidentes. 

Durante todo el camino, Yoko luchó desesperadamente contra la vergüenza interna. Le hizo cosquillas por dentro la idea de que no pasaría la noche sola. Ella nunca ha traído chicos a su casa, pero aquí dos de ellos la llevan a la vez a su casa, aunque no familiar, pero sí un nido pequeño y acogedor. 

La chica se acostumbró a la soledad, le gustaba estar sola y hacer todo sin interferencias externas, cocinar, dormir, mirar televisión, leer libros, limpiar. Tan pronto como alguien pisó su territorio, se perdió y no pudo encontrar un lugar para sí misma. Se sintió incómoda cuando alguien merodeaba y se ponía bajo sus pies. A Yoko siempre le pareció que con este enfoque nunca podría casarse, tener hijos y simplemente ser feliz al lado de un hombre. 

Encontró la felicidad en otras cosas que muchas mujeres no pueden entender. 

Siempre ha sido así en el mundo, si una mujer vivía toda su vida sola, sin marido ni hijos, no formaba una familia y no podía encontrar el amor, automáticamente se le asignaba el estatus de "perdedora". 

Yoko siempre se irritaba cuando pensaba en eso. 

¿Por qué debería seguir las reglas establecidas por alguien? ¿Por qué debería poner excusas por el estilo de vida que eligió? 

Se siente bien sola, está acostumbrada a hacer todo sola toda su vida, nunca necesitó la ayuda de un hombre, pero de todos lados seguían diciendo, búscate un chico, morirás sola, debería haber un hombre cerca. ¿Cómo puedes estar sin apoyo? La chica literalmente se volvió loca por la falta de comprensión de la mayoría de las personas. 

Ellos, producidos como en la misma fábrica, vivían según el mismo escenario y tenían miedo de salirse de la línea preestablecida. Yoko no tenía miedo y por eso no la entendían. 

- Hemos llegado, Jimin se desabrochó el cinturón de seguridad y fue el primero en salir del auto y mirar a su alrededor.  

Yoko se detuvo junto a Jimin y empezó a buscar las llaves en su bolso. 

- Te lo advierto de inmediato, no hay suficiente espacio en la casa, tendrás que dormir... 

- Sabemos cómo es en tu casa, se acercó Jungkook, sonriendo. 

La muchacha lo miró de reojo, pero permaneció en silencio. 

- Vamos. 

Cuando Yoko encontró las preciadas llaves, rápidamente abrió la puerta, dejó entrar a los detectives en su territorio y luego les abrió la puerta de su modesta morada. La misma luz tenue se encendía desde el único candelabro que estaba convenientemente ubicado en el techo amarillento, agrietado en algunos lugares. Aunque la casa era antigua, estaba limpia y ordenada, la chica trató de mantener la casa en orden para que no hubiera rastro de polvo o suciedad. 

Oxímoron Negro (Jikookmin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora