Sirius Black sigue vivo, y después de haber sobrevivido ante el ataque en el ministerio, decide traer de regreso a su única hija.
Lyra Black se crió en un orfanato, lejos de su madre, y teniendo la certeza de que su padre se encontraba en prisión...
"Demasiado rápido para matar el para siempre. Tantas razones por las que no eres mío. Tal vez si te hubieras tomado más tiempo, yo seguiría siendo la persona con la que quieras hablar todas las noches. supongo que nunca imaginé que nuestro "para siempre" sería tan corto. Pensé que podría, pero no puedo olvidarte".
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1997, [Don't blame me, my father's best friend is hot]
Lyra Black.
Lyra había descubierto dos cosas.
Uno, las personas eran pasajeras.
Ella se había desgastado por tantos años para lograr que la gente se quedara a su lado, aceptó puñaladas por nada. No tenía sentido.
Cada uno era responsable de su propia vida y de seguir su propio camino, Lyra no podía evitarlo.
Creer que alguien le pertenecía la convertía en una idiota; porque le dolía entender que estaba sola, y que probablemente, así sería siempre.
Nadie era suyo, no por completo.
Y dos, la vida no se detenía por nadie.
Ni siquiera por ella, que sentía como moría en vida, como se ahogaba en su puto dolor que no la dejaba en paz.
Ella deseaba detener el tiempo, buscar un maldito giratiempo y lograr evitar toda esa agonía que solo la debilitaba.
Era increíble como meses atrás no le importaba nada de esto, como podía vivir su vida sin pensar en la soledad o los sucesos que se avecinaban por la guerra.
Ahora era diferente, a Lyra la querían muerta y ella no podía hacer más que adaptarse a su entorno si quería sobrevivir.
Lyra entraba a la sala común de Gryffindor, respaldada por Frank y un grupo enorme de guardaespaldas que no la dejaba en paz ni un solo momento. Había notado que ya era madrugada, no había ningún estudiante despierto... y cómo única excepción, Harry se encontraba en la sala común, esperándola junto a la fogata.
Sabía la razón.
Fue directamente a su lugar, tirándose de rodillas al suelo para inclinarse hacia la fogata en dónde su padre se encontraba hablando con Harry. Lyra ignoró la presencia de todos esos Aurores que tenían la obligación de cuidarla.