Haesen seguía muy serio esperando mi respuesta.
-Yo... La encontré en un álbum de fotografías, en una bodega de abajo.
-¿Y por qué la tomaste? -Estaba enojado.
-Porque creía que eras tú.
-¿Creías? O ¿Crees?
-Ahora sé que eres tú -Me armé de valor y decidí enfrentar esta situación.
-¿Por qué? -Ay dios, ya no sé que decirle. Y me distrae más con sus mínimas prendas.
-Es más que obvio que eres tú, eres idéntico.
-¿Y qué me dices de la ropa? -Haesen tenía la mandíbula apretada.
Recogí las playeras y me senté en su cama para doblarlas, me concentraré en esa labor para así sacar el tema con puntos a mi favor.
-Haesen, me vas a disculpar pero yo... -Desvíe la mirada para empezar a doblar sus playeras.
-¿Tú qué? -Insistió en que prosiguiera.
-Pero yo leí tu diario y no estoy muy segura, pero sé que no tienes la edad que aparentas -Bien, ya salieron las palabras, ahora falta la respuesta.
-No, no la tengo -El corazón se me disparó a mil pero guardaré la calma -¿Y eso cambia algo Alicia? -¿Qué? ¿Como que si cambia algo?
-¿Algo de qué? -Me giré a verlo.
-No lo sé, dime qué piensas sobre eso - Ya no me miraba frío y tampoco enojado, su mirada no demostraba nada.
-Me hubiera gustado que me lo contaras a noche -Seguí doblando las playeras.
-Tú bien sabes que a noche pasó algo Alicia -¿A eso se refería si había cambiado algo? Yo no quería llevar el tema por ahí, por: "más que amigos ".
-Sí, lo sé -Bien si él va por ahí, yo también -Se supone que nos teníamos más confianza -Aplausos. Un punto a mi favor.
-¿Y me hubieras creído?
-Si no fuera por tí, yo no me hubiera creído eso de los "Mestizos" Claro que sí, si me explicabas -Y era verdad, yo no le creía nada a Dominic hasta que llegó Haesen y hablamos del tema.
-Esto es diferente -Que no se atreva a salir con eso de "es diferente ".
-¿Diferente cómo? -Terminé de doblar sus playeras, iba a guardarlas pero me detuvo y me las quitó de las manos para de nuevo ponerlas en su cama.
-Quiero que me escuches, no es fácil hablar de esto con alguien que apenas conozco. -Acepto que esa respuesta me dolió un poco.
-¿Entonces por qué dices que a noche pasó algo? -Haesen sólo me confundía.
-Sí, lo siento -Bueno al menos lo estaba intentado -A noche no pasó nada. Sólo robamos galletas y conversamos -Y eso sí dolió. Te faltó agregar que dormimos abrasados y que me cargaste para ponerme en tu cama. Dije irónicamente en mi mente.
-Bien Haesen, no tienes que explicarme nada, no te preocupes yo me quedaré callada -Tomé sus playeras y las metí a su cajón. Él se quedó en silencio sólo viendo mis movimiento.
-Y una vez más, de verdad lo siento por haber leído tu diario.
-Espera -Ojalá y no me diga otra cosa dolorosa. Me giré a verlo, vi sus ojos suplicantes, pero se quedó sin palabras y bajo la mirada -¿Podrías devolver la fotografía? No la quiero.
-Sí, claro -Le dije apenas en una voz audible. Tomé la fotografía y sin decirnos más, salí de su habitación.
Me guardé la fotografía en el saco y caminé hacia la cocina donde seguramente Adeline me estaba esperando.
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Eternos: Juego De Sombras
FantasyLa sangre es lo que nos define, lo que nos separa y lo que nos une. Si la cabeza domina cuerpos y el corazón domina mentes ¿Quién es más peligroso entonces? No juegues con lo que no entiendes. Primera regla de los normales. Si vas a quemarte, asegúr...