20 - Hipócrita

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Algo más difícil que explicarle a su hermano que en lugar de novia ahora tenía novio, era lograr tener tiempo a solas con él para tener esa charla.

La cabaña donde dormían no era una opción, ya que también estaban Kyler y Eric, y no estaba seguro de que enfrentarse a los mejores amigos de Logan sin preparación fuese una buena idea. Ellos eran buenos con él, amables y —se atrevía a decir— buenos amigos. Pero también comprendía el historial de Logan, así como el antecedente de Scott en su vida.

Kyler y Eric serían terreno minado, así que debía ser cuidadoso.

Pero Dylan también pasaba mucho tiempo con Will o con Poppy. Y sus amigos tampoco debían de saberlo aún, no hasta que él pudiera hablarlo frente a frente con su hermano primero.

Se mantuvo a la espera del mejor momento, y cuando vio que Dylan se levantó de su asiento para ir por algo a la mesa de bufé, él también se puso de pie.

Llevaban puesta ropa para ir a esquiar. Dylan incluso cargaba un gorro de lana azul, igual que el blanco de Finn. Pero Logan tenía razón, en Dylan y Will todo parecía estarse publicitando en una revista o catálogo. En los demás solo eran prendas comunes.

—Hey, hola —saludó Finn, llegando junto a su hermano y tomando un plato para justificar su presencia, incluso aunque ya estaba lleno—. ¿Irás a esquiar también?

Dylan lo miró confundido, porque era gracioso que preguntara algo que era evidente, pero Finn lo comprendió hasta después de guardar silencio.

Estaba nervioso, fuera de su zona de confort. Aunque siendo honesto, todo lo que hacía últimamente estaba a quince millones de hectáreas de distancia de su zona de confort.

—Sí —dijo su hermano, porque él siempre sería amable incluso aunque deseara reírse—. Me sorprende que también vayas, creí que estarías muy cansado como para levantarte temprano.

—¿De qué hablas?

—Te escuché volver a la cabaña hasta en la mañana. ¿Tuviste una noche interesante?

Finn se aclaró la garganta. Echó un vistazo hacia la mesa donde estaban sus amigos. Logan se encontraba sentado cerca de la ventana, pero discretamente levantó un pulgar, animándolo, a pesar de que su gesto era de consternación pura.

—Sin duda fue una noche con muchos acontecimientos.

Dylan le sonrió. Se veía alegre, casi orgulloso, y Finn solo deseó que siguiera igual de positivo luego de aclararle que no fue con quien él pensaba.

No es que le preocupara que su hermano supiera que salía con Logan. Dylan obviamente no tendría problemas con el elefante rosa en la habitación. Pero la situación era compleja, no solo se trataba de darle una palmada en la espalda y felicitarlo por haberse enamorado. El hecho de que también se tratara de un chico iba a dejar sobre la mesa lo inevitable.

Una guerra inminente en su familia que acabaría con lo poco que quedaba se acercaba.

—¿Quieres hablar de eso? —preguntó Dylan al mismo tiempo que ponía en su plato un poco de huevos con espinaca.

Finn seguía con el plato vacío, pero se aferraba a él como si su vida dependiera de ello.

—En realidad sí. Verás, técnicamente ya soy novio de alguien.

A su hermano se le iluminó el rostro y lo miró igual que si presenciara sus primeros pasos.

—Finn, eso es increíble. Me alegra. ¿Se lo pediste tú?

—Sí, ¿puedes creerlo?

—Guau. Estoy muy orgulloso de ti. Coco es increíble.

—Sí, muy increíble. Pero Coco no es mi novia.

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