LA ESPOSA ÁRABE. Despreciada.

CAPITULO 34

Khalid Al-khalifa y Jhon se  reunieron para impartir informe de lo que Jhon tenía
—Este es uno de los hombres de seguridad de la señora Fátima, señor Al-khalifa, después de que usted la echó de aquí ella se fue a Nueva York junto con él, y de ahí se le perdió la pista. —informó el jefe de seguridad cuando el teléfono de Jhon sonó, el contestando de inmediato por ser el contacto de Nikolay quien llamaba.
—Dime Nikolay. ¿Que noticias me tienes?
—Sabemos quién la tiene, Pero aún no damos con su ubicación.
—¿Quien la tiene?
—Su hermana... Fátima Al-khalifa, le montamos guardias para dar con Rania, solo ella es la enemiga de su hermana, Ahora lo único que se sabe es que el avión privado salió con destino a Nueva York, Pero nunca aterrizó. —dijo Nikolay. Jhon sintió un frio recorrer su espalda. ¿Cómo era eso posible?
—¿Estás seguro de lo que me dices?
—Completa mente....—respondió Nikolay. Jhon miró a Khalid que estaba atento a cada gesto que hacía el al hablar.
—¿Que carajos sucede? —preguntó khalid sintiendo una muy controlada angustia.
—Fátima tiene a Rania...y no comprendo...el avión donde iban aterrizaría en Nueva York y nunca llegó. —dijo Jhon pasando sus manos angustiada mente por su rostro.
—La vamos a encontrar. —dijo Khalid seguro de saber dónde empezar a Buscar a Fátima.

Fátima aparentaba ser  una joven soñadora, y buena hermana,  siempre buscando nuevas formas de expresar sus emociones. Desde pequeña había sentido una profunda soledad, hacía todo por llamar la atención de su madre, pero siempre era su padre quien la consentía,

Un día, mientras jugaba en el parque, Fátima se encontró la mascota de Rania, un gato ashera, miró a todos lados para no ser vista y lo atrapó en una bolsa plástica y lo escondió.
Fátima vio a lo lejos a Rania buscar a su gato.
Fátima se acercó tímidamente a ella.
—¿Que haces hermanita? —habló con sutileza y maldad oculta.
—Estoy buscando a mi gato, hace rato que no lo encuentro. —Rania expresó con preocupación.
—Vamos...yo te ayudaré a buscar, pobre, debe estar muertito de hambre. —dijo Fátima causando sorpresa en Rania. Pues nunca quiso su gato y siempre le hacía maldades,
Rania, sorprendida por el gesto de  Fátima, decidió aceptar la ayuda de su hermana, emocionada por la oportunidad de compartir un momento de cordialidad de parte de Fátima, Rania aceptó de inmediato.
Buscaron por todas lados hasta que Fátima la guió hasta donde estaba la bolsa y el gato dentro ya asfixiado.
Al llegar al lugar  Rania quedó perpleja al ver a su gato en esa bolsa plástica, corrió a darle ayuda mientras Fátima reía  maravillada por la tristeza y desesperación de Rania,
—¡Gasper! Por Aláh Gasper¿Mi amor quien te hizo ésto? ¿Quien tiene el corazón tan cruel para hacerte daño?  Se decía entre sollozos y lágrimas. Rania hizo mil y un intentos por ayudar a Gasper pero le fue imposible salvar su vida.
—Ya Rania...no exageres e solo un gato, ya tendrás otro. —dijo con expresión fría e indiferente que Rania quedó sorprendida por la insensibilidad de su hermana..
—No es un simple gato Fátima, es mi gato, mi mascota...por Aláh..no creo que tengas un poco de compasión. —dijo Rania.
FIN flash Back.
Rania abrió los ojos después de recordar su niñez junto a su hermana y nunca comprendió el por qué de su comportamiento y dureza de corazón con ella, era como que disfrutaba haciendo la sufrir y haciendo que todos la vieran mal.
—¿Que quieres Fátima.? Me alejé de todos para que seas feliz te dejé el camino libre con Ali ¿Que más quieres de mí? —preguntó Rania despertando del profundo sueño en el que se encontraba, estaba aturdida no tenía noción de cuánto tiempo la durmieron. Miró a todos lados y vió las paredes todas blancas y ella atada a una camisa de fuerzas.
Cerró los ojos y trató de recordar el momento en que fue interceptada por una camioneta.
Flash Back.
Rania después de recibir el mensaje de Jhon, preparó sus cosas y fue a la hacienda para dejar a Jhon con su abuela, había recorrido mucho terreno cuando a mitad del camino estaba una camioneta aparentemente descompuesta.
—¿Puedo ayudarle ? —se ofreció a la pareja que estaba ahí intentando arreglar su vehículo.
—No se que le pasó, intentamos llegar  a la feria del pueblo y se nos descompuso. —dijo la mujer acercándose a ella.
—Los llevaré al centro del pueblo y Desde ahí pueden enviar una grúa para la camioneta. —se ofreció Rania sin imaginar lo que sucedería después.
—¿Puedes ayudarme con mi novio? Tiene capacidades especiales por favor. —dijo la mujer caminando hacia la camioneta según descompuesta y justo en el momento en que Rania intentó ayudar, sintió el fuerte olor a amoniac0 haciéndola perder la razón. Y ahora despertando ahí.
FIN Flash Back.
—¿Fuiste tú la que envió a esos mentirosos a secuestrar me? —dijo Rania con desesperación.
—Patética... siempre patética. Nunca te encontraran y sabes por qué....—Fátima contó el por qué no la buscarían Nunca.
Flash Back.
Después de dormir y subir a Rania a la camioneta el hombre bajó del vehículo y lo rodeó, mientras la mujer le regaba combustible para después prender fuego.
—Debé quedar completamente calcinada así creerán que fue un accidente. —dijo la mujer cuando fue golpeada y cayendo inconsciente al suelo, el hombre la arrastró y le subió a la camioneta de Rania y prendió fuego haciendo que la mujer quedara totalmente calcinada, esperó por mucho en un lugar oculto y luego marcó al emergencia denunciando el accidente
FIN flash Back.
—Que mente tan retorcida tienes Fátima..estás enferma. ¿Eres mi hermana como puedes hacerme esto.?
—dijo sintiendo temor por lo qué escuchaba, se sentía muy angustiada por su pequeño y el peligro que representaba Fátima, pues le había mostrado fotos de todos los compartir que había vivido con su padre.
—Fátima...por favor...dime qué es lo que quieres, yo desaparecí de la vida de ustedes y ahora ti apareces haciendo me daño. ¿Que hice de malo contigo?
—Ser la favorita de todos, y pude hacer que todos te odien, madre a pesar de que creía todo lo que hacía haciéndome pasar por tí, aún así no podía entrar en su corazón, en cambio mi padre, mi padre si me amaba hasta que apareció ese imbécil y lo arruinó todo, Jhon Maxwell arruinó mi vida. Ahora se arrepentirá de haberme descubierto ante mi padre. Desde ese día el me echó y ahora tú pagarás por todo eso estúpida.
—Fátima.... Fátima escúchame....todo tiene solución, déjame salir de aquí. Por favor mi hijo me necesita....
Rania sintió un frio invadir su cuerpo en el momento en que dijo esas palabras, miró a Fátima que reía maliciosamente.
—No te preocupes por tu hijo hermanita....yo cuidaré de el así como cuide de Gasper....¿Recuerdas a Gasper? Pobrecito, triste final. —dijo mientras Rania sentía su corazón salir de su pecho del miedo que sentía.
Fátima caminó a su alrededor y la agarró del cabello.
—Aquí te quedarás y nadie te encontrará. Nadie sabe dónde estás. Aquí vas a morir y jamás volverás a ver a tu hijo....¿Me escuchaste?  ¡Jamás! —dijo soltando la bruscamente haciendo que Rania cayera de la silla y partiendo su labio.
Fátima salió de la habitación blanca y entregó las llaves junto con las instrucciones para que la mediquen cada día.
Fátima salió de la clínica psiquiátrica, pagó al director una fuerte suma de dinero y salió de ahí para ir al aeropuerto y volver a Nueva York.
Rania sentía los nervios a flor de piel, podía gritar todo lo que podía, y nadie acudía a su auxilio.
—Aláh...¿En qué momento pasó todo esto?creí que iba camino a mi felicidad y me encuentro aqui encerrada lejos de mi hijo..y de Jhon. Jhon...por favor ven por mí mi amor...por favor... ven. —pedía Rania entre sollozos y lágrimas que bañaban su rostro.
Lloró tanto que no supo cuánto tiempo lo hizo, escuchó entrar a alguien y vio a un enfermero entrar con una jeringuilla. Se acercó a ella e intentó zafarse forcejeando, sin poder hacerlo..
—No...no por favor...no lo hagas .no me duermas por favor..—dijo sin ser escuchada y poco a poco fue cayendo en la somnolencia, cerró los ojos y sentía que su mundo giraba sobre ella, tenía náuseas y solo el intentar abrir los ojos, sentía que daba vueltas.
Así los días se convirtieron en semanas, cada día Rania era dopada y la mantenían encerrada con una camisa de fuerzas. Poco a poco sentía perder la noción del tiempo, no sabía cuántos días tenía ahí encerrada, sin ver el sol, no sabía si era de día o de noche, solo se mantenía aferrada al  recuerdo de Jhon, y su pequeño hijo, y pronunciando sus nombres era lo único que la tenía atada a la cordura.
Mientras Rania era prisionera de Fátima.

Jhon, Khalid Al-khalifa y Nikolay seguían las pistas de Fátima en Nueva York. Sabía que la vigilaban constantemente y trataba de llevar una vida normal y sin secretos, iba a la universidad, y compartía con sus amigas.
—Nunca sabrás que fui yo quien tiene a tu hijita quería Khalid Al-khalifa. Rania Al-khalifa morirá ahí encerrada. —se decía mirando por el espejo retrovisor de su auto.
Khalid sentía impotencia al no poder encontrar a su hija. Cada día recibía el informe de cada movimiento de Fátima y todo era tan normal en ella y su diario vivir.
—El teléfono....—dijo Nikolay.
—¿Que pasa con el teléfono? —preguntó Jhon y Nikolay sonrió.
—Necesito su número telefónico, es el último recurso que nos queda, ella parece no temer a nada, vive su vida de lo más normal...lo que nos demuestra que ella no tiene a Rania.
—¿Y si en verdad no la tiene? —interrogó Khalid sintiendo una gran duda en su interior.
—Su ir y venir cada día no nos lleva a ningún lado, estamos perdiendo el tiempo, demuestra tener una vida normal, ahora toca intervenir su teléfono. —dijo Jhon desesperado por no tener pistas de Rania.
—No tengo su número, lo necesito para intervenir su celular.  —dijo Nikolay .
—Desde hace años no tengo comunicación con ella, desde que Jhon la descubrió frente a todos salió furiosa cuando le dije que la desheredaba de todo.
—Eso debió ser devastador para ella,
—Lo fué y me despreocupe tanto, que nunca me interesó saber de ella. —dijo Khalid mirando cada cosa que hacía según el vídeo que veian.
Jhon sentía frustración al no dar con el paradero de Rania. Sentía que cada segundo que pasaba era crucial para su rescate.
Fátima, actuaba inteligente mente, sabía que la seguían y como cada dia, ese día fue a la universidad, cumplió con el horario establecido y salió como cada día lo hacía.
Dió unos pasos y se paró  para mirar su celular, y pudo percatarse de que ese día ya no estaban los hombres que siempre encontraba.
—Perfecto...se dieron por vencido, pude demostrar que no tengo a la insulsa esa, se cansaron de seguirme y ver la miserable vida que llevo, cambiar de avión, para ir a Francia y dos días después a Nueva York los despistó completa mente.  —se dijo sonriendo así mismo.
—Eres cruel Fátima...muy muy cruel. —y luego se reprochó asi misma con una sonrisa maliciosa.
Fátima entró a su auto y condujo sumida en sus recuerdos. Esos que dolían y ahora entiendo por qué tenía que siempre actuar así para poder tener un poco de atención de parte de khalid Al-khalifa y su esposa y hacer que Rania quedara relevante.
Flash Back.