UN NUEVO DESTINO

capitulo 31

Permanecieron tres semanas en caldera, mientras el palacio se recuperaba de las consecuencias del ataque de azula y las personas se curaban, incluyendo a los niños.

Mientras esperaban, por las mañanas Touya y Shouto entrenaban con Aang, pero para ellos, no era lo mismo y Aang lo sabía, pero nunca los reprocho, sabía que estaban pasando por un luto.

Una semana después, se realizó una pequeña ceremonia funeraria a Zuko, no tenían su cuerpo, por lo que solamente lanzaron globos al aire.

Iroh fue uno de los que rápidamente se curó gracias al agua espiritual y el control de Katara y Natsuo.

Él siguió la propuesta de Tenya junto con algunas sugerencias de los niños mayores, empezó a cambiar el sistema de la nación del fuego.

Por supuesto hubo mucha negativa ante eso, especialmente de los sabios del fuego, pero Iroh con su usual carácter no lo permitió y continuo con la reforma.

Y la primera persona que quedó a cargo de la nación del fuego, fue su viejo amigo, el capitán Jee, quien estaba honrado ante tal responsabilidad.

Aang por su parte había ido al mundo de los espíritus con la esperanza de encontrarse con Zuko y darle a los niños una última visita.

Pero nunca lo encontro, por lo que optó por la segunda opción encontrar una manera de regresarlos a su hogar.

Por un milagro, el Avatar obtuvo la ayuda de tanto Yue como agni, quienes les habían concedido un camino de regreso a casa pero solo se podía en el oasis de los espíritus de la tribu agua del norte.

Y así tan pronto como los niños estuvieron listos, partieron hacía Agna, Qela.

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Katara y Sokka ofrecieron el barco de su padre, quien había venido para hacer comercio con la nación del fuego, era una manera de disculparse con los niños por todo el daño que Katara había causado.

A la semana de viaje, la pequeña Izumi estaba harta de estar en los brazos de su Shouto, quien no había querido soltarla, ya que era lo último que les quedaba de Zuko.

Así que una tarde, mientras el clima estaba tranquilo, los niños permitieron que caminara por la cubierta, bajo supervisión por supuesto.

También era la primera que Hakoda, el jefe de la tribu agua del sur, la conocía y vaya sorpresa la que se llevó al mirar la cara de la niña.

-Hay algo que me quieras confesar hijo. -Pregunta Hakoda mientras tomaba en brazos a Izumi, quien se frustro tanto que empezó a golpearlo para que la bajara, quien lo hizo mientras soltaba una carcajada. -Ya veo, estás en esa edad.

-Ha estado muy estresada, porque no la hemos dejado caminar por su cuenta. - Explicó Fuyumi mientras consolaba a su hermana que tenía el ceño fruncido. -Y si puedo preguntar.. ¿que quiso decir la primera vez?

-La princesita, aún es poco visible, tiene la misma nariz y ojos de Sokka, quien lo saco de madre, Kya. - Explicó Hakoda con una sonrisa triste mientras miraba a Izumi, quien le sacó la lengua con molestia -Y tiene la misma actitud que tenía Sokka a esas edad, siempre queriendo ser independiente.

-Cómo así?!! -Exclamo Katara mientras se acercaba a Izumi y la miraba más de cerca, la niña se puso tensa ante la atención y buscó maneras de escapar. -Tienes razón, cómo fue posible que no me diera cuenta.

-Es como dije, no es muy notable. -Explico Hakoda mientras le entregaba un pequeño Boomerang hecho de madera a Izumi, a la cual se le iluminaron los ojos de alegría, para diversión de Katara y Hakoda. -Lo reconocí porque claramente es mi hijo y lo crié desde que nació.