—¿Qué haces?
Sakura sonríe sin dejar de escribir es su teléfono, están de camino al lugar donde se encuentra la persona que creo a Ai, le emociona saber quién es y preguntar cómo se las ingenió para crear a alguien tan magnifico como lo es el chico de cabello cian.
—Solo le estoy enviando un mensaje a Reiji.
—¿Son novios?—pregunta de forma directa mientras la escudriña con la mirada, es la única explicación para el comportamiento de ambos que se viene dando desde hace unos días.
Ella deja de escribir y deja salir una pequeña carcajada, causando que Ai frunza el ceño al no ver lo gracioso en la pregunta, la misma reacción tuvo Reiji cuando le preguntó el día anterior, pero espera que al menos la chica si le responda y no lo deje con la duda.
—No, no lo somos, pero de serlo, no veo problema—Continua escribiendo el pequeño mensaje, solo quiere avisarle que estará con el más joven.
Desde hace un par de días decidieron mantenerse en contacto a través de los teléfonos debido a que, esa semana previa al programa de variedades, el mayor estaría muy ocupado y no podrían verse mucho por lo que él insistió que al menos tres veces al día se escribieran algo relevante que ha sucedido en el transcurso de la jornada.
—Está prohibido, ahí está el problema.
—Lo sé.
—¿Entonces?
Sakura sonríe y lo abraza por los hombros a pesar de las réplicas del menor que, al final, solo se resigna a que no lo soltará por unos momentos. Es muy poco probable que lo reconozcan desde el interior de un taxi, pero el conductor de vez en cuando les dirige una mirada y ese hombre no parece del tipo discreto.
—La vida es mejor si la vives brillando. Y no me refiero al espectáculo sino, más bien, a que ser feliz es el brillo que se debe buscar.
Ella sonríe y le guiña un ojo, es una actitud juguetona que lo ha irritado bastante. En ningún momento se ha equivocado, y está seguro que los otros miembros de Quartet Night igual, en que tanto Reiji como Sakura tienen similitudes en comportamiento, aunque a ella la soporta más porque no se dedica a irritar gente como lo hace el castaño, además ella parece ocultar algo distinto tras esa sonrisa, siempre junto a un corazón triste.
—Eso significa que, por tu felicidad, dejarías la agencia.
—Exacto, es más importante ser feliz, Ai-chan, ten eso en mente siempre. Cuando no se es feliz o no se experimenta dicho sentimiento, los humanos solemos desarrollar depresiones que conducen a extremos como lo es el suicidio e incluso, algunos que sufren algún tipo de enfermedad mental, pueden llegar a ser homicidas solo por la desdicha. La mente humana es tan frágil.
Ai la escucha con atención, se ha escuchado tan madura y solitaria al decir eso, como si ella anhelara ese sentimiento, pero comprendiera que todo es en su momento. Le ha parecido una persona diferente, pero que, al mismo tiempo, es la misma; lo ha dejado maravillado por la profundidad de sus palabras y su mirada.
Ella le dirige una mirada y hace un ruidito de duda al verlo mirar directo a su rostro de una forma algo embelesada, es una mirada muy fija y que la está comenzando a poner nerviosa.
—¿Ai-chan?
Él se sonroja un poco y frunciendo el ceño como si lo hubieran desobedecido dirige su vista hacia otro lado; no entiende por qué el verse descubierto mirándola demasiado fijo a causado esa reacción, pero le da un poco de vergüenza que ella pueda creer algo raro sobre eso.
—¿No terminarás de enviarle el mensaje a Reiji?—dicho eso logra soltarse de su abrazo y alejarse un poco más de ella en el reducido espacio del taxi, sus mejillas todavía mantienen un leve tono carmín y se pregunta cómo es posible que pueda sonrojarse si se supone no tiene sangre en sus venas.
¿Ilusión? ¿Refracción de luz? ¿Algo científicamente posible?
Sakura se distrae por completo e ignora el debate interno del chico, debe terminar de enviar el mensaje que al no saber cómo resumir todo lo sucedido solo ha escrito un par de palabras. Después de pensarlo mucho lo envía.
"Ai-chan no ha podido cantar la canción todavía, eso me preocupa. Iremos con quien lo creo para saber la razón de ello; se nota que está frustrado, ¿suele demostrar ese tipo de emociones? Espero en la noche podamos cenar y hablar de lo que dijiste.
¡Sigue esforzándote! ;)"
Guarda el teléfono para centrar su atención de vuelta en el más pequeño, hasta ese momento se da cuenta del ligero sonrojo. Le parece la cosa más impresionante, se supone que es un robot y, aunque esté vivo y sea alguien maravilloso, es imposible que pueda tener semejante reacción, a menos que su creador lo haya confeccionado de esa forma para hacerlo ver mucho más humano, eso sería increíble y merecedor de algún premio.
—Ai-chan, ¿tú vas al baño?—la pregunta aparentemente inocente y muy curiosa consterna un poco al chico que la mira como si se hubiera vuelto loca.
—Por supuesto.
Una expresión de sorpresa sale de su boca y después sonríe, entonces su creador sí lo hizo muy humano, no solo con la capacidad de desarrollar emociones sino que también con la capacidad de cumplir con necesidades básicas. Ai es como un humano creado de forma artificial.
Después de eso el resto del camino lo transcurren el silencio, el chico se veía bastante incómodo con la última pregunta por lo que ella opto por dejarlo tranquilo y preguntar todo lo demás a la persona a quien se refirió como profesor.
Al llegar, el lugar se le hace vagamente familiar, quizás en alguna ocasión pasó cerca de ahí y algo captó su atención para que eso suceda. Y es claro que quien sea el "padre" de Ai no es una persona con mucho dinero, pero sí consiguió los recursos para lograr crear al ídolo.
Mikaze abre la puerta, tiene una llave porque es como su casa, aunque sí debe pedir permiso para ingresar al laboratorio del profesor.
El interior es acogedor, como el hogar de una familia amorosa, aunque Ai sabe que el profesor dista de ser considerado de esa forma, aunque sí lo apoya en sus decisiones buscando la mejor forma de ayudar y siempre está pendiente de él.
—Veré si está en el laboratorio.
Sakura se sorprende, en esa casa hay un laboratorio. Sonríe con emoción, aunque ello se ve apagado al ver a alguien que conoce saludar a Ai.
¿Hakase es quien creo a Ai?
Puede ver los ojos oscuros del tío de Aine sobre ella, nunca pensó volver a verlo y las preguntas sobre sí Aine estará en ese lugar la asaltan. Acaba de reencontrarse con su pasado.
Y el capítulo 26 nos trae al tío de Aine :o no sé por qué me da por escribir tan de madrugada, pinchi inspiración que no entiende que amo dormir -.-
¿Qué les pareció el capítulo? ¿Qué creen que suceda a continuación? ¿Alguna opinión de lo hablado entre Ai y Sakura? ¿Qué les pareció el mensaje de Sakura? xD
¡Gracias por leer!♥Besos.
ESTÁS LEYENDO
Melodía de mí alma [Utapri]
FanfictionSakura Oshiro es una ídolo que había desaparecido del mundo del espectáculo años atrás después de la misteriosa desaparición de Aine Kisaragi. Ahora, dispuesta a comenzar de nuevo, regresa a la Agenicia Shining para retomar su olvidada carrera. Su p...