Capítulo 21

489 59 26
                                    

Sakura corre por toda la mansión llevando diversas cosas. Otoya la sigue de cerca cargando otras cuantas, ambos se ven muy apurados. Ese es un día especial.

Se ha secuestrado a todo aquel que tiene ese día libre, incluido Ai que hace su tarea con un gran amor asesino con ayuda de Ranmaru. Ambos están en la cocina preparando un pastel, ella se ha encargado de que no puedan escapar de hacerlo. Los dos están sorprendidos de que tenga tanta fuerza para amenazarlos, aunque Ai comprende el empeño que le pone.

Es el cumpleaños de Reiji.

Sakura después de ir de un lado para el otro y pidiéndole de favor a cuanto se le cruzara en el camino quedó con casi todo Starish preparando la mesa en el comedor. Ahora solo queda pensar como hará la cena si su cocina es desastrosa, no va a pedírselo a Starish porque solo Otoya parece entusiasmado con una fiesta para su senpai, eso sin contar a Cecil y Natsuki que están bastante cooperativos y parecen igual de emocionados que el pelirrojo.

Ella se dirige a la cocina para encontrarse a Ranmaru y Ai sentados viendo el horno, no entiende eso ya que tendrían que saber el tiempo necesario.

—¿Q-Qué hacen?—hasta le da un poco de nervios preguntar, y no puede evitar sentir un escalofrío de terror al ver la afilada mirada del más alto.

Mikaze se levanta mostrando un obvio aburrimiento, estar en la cocina haciendo un pastel no es una actividad que le guste, prefiere incluso estar con los ruidosos del comedor a estar ahí con el creciente mal humor de Ranmaru. Y ahora que ella está ahí puede distraer su atención del de cabello plata y preguntar algo a lo que no había prestado atención hasta hace poco.

Sakura retrocede y centra su atención en el menor, su mirada no refleja hostilidad.

—Uh, Kurosaki—recibe un sonido por respuesta a su llamado—, ¿me ayudas a preparar la cena?

—¡¿Quieres que te ayude todavía?!—Se pone de pie de inmediato para pararse frente a ella, se tiene que inclinar para poder tenerla cara a cara—, eso ya no será gratis, ese estúpido pastel era lo único que cocinaría según tus palabras. ¿Qué me darás a cambio de una cena para ese idiota?

—No le digas así—Es lo primero que sale de su boca, además de hacer una expresión de angustia debido a que siente que tiene una fiera enfrente—, ¿una canción es suficiente?

Ai alza una ceja, es un extraño intercambio y no le parece que una canción sea algo fácil de hacer cuando se lleva tan mal con la persona, recuerda el método de Nanami y se pregunta si ella tendrá algo similar; después de todo ella solo ha compuesto para personas que conoce y les tiene un gran cariño, o eso fue lo que le explico en la mañana porque tenía dos canciones solo para Reiji, las había pasado componiendo desde la semana pasada y ya tienen todos los arreglos.

—Que sea mejor a la que cantaste en ese evento benéfico—dicho eso vuelve a sentarse frente al horno sin quitar su expresión de fastidio total, al menos saco algo bueno de toda esa estupidez. Esa chica es igual de insoportable que su compañero de cabellos castaños, aunque al menos ella no pulula a su alrededor como abeja ni le hace bromas.

Sakura suspira y piensa en cómo puede hacer una canción para él, cómo capturar la esencia de él en una melodía. Lo único que tiene claro es que será una canción muy salvaje.

—Quiero preguntarte algo.

—Seguro, Ai-chan.

La toma del brazo para llevarla a otro lugar, de lo que quiere hablar no lo debe escuchar nadie más ya que no les incumbe. Se la lleva hasta la fuente en la parte de enfrente.

—¿Por qué no sucedió nada con Aine?

Sakura sonríe y lo toma del rostro, él retrocede un poco por la impresión del acto tan repentino y muy fuera de lugar.

Melodía de mí alma [Utapri]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora