Capítulo 48

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Después de que Shion se fuera, ambos se han ido a un café para conversar. Aunque, Ranmaru mantiene una expresión de disgusto con la intención de decir algo.

—¿Por qué lo invitaste?

—No imaginé que pasaría esto, solo quería que conociera un poco más Japón.

—Pues no ha salido muy bien, para la próxima invítalo a una de tus citas con Reiji. Quizás salga mejor—La mira fijamente al tiempo en que ella frunce el ceño por la mención del mayor, eso no está tomando buen rumbo—. Cambiando de tema, no quiero discutir, mi mañana ha sido suficiente fastidio. ¿Alguna idea para las dos canciones?

—Más allá de que deben ser rock, no tengo idea. Casi ni te conozco, no sabría cómo plasmarte en la canción y que te identifique solo a ti.

Dicho eso ambos guardan silencio. Consideran seriamente la forma de llegar a un conciso para escribir las canciones sin inmiscuirse demasiado en la vida personal de Kurosaki.

Ranmaru se mantiene con la vista fija en ella, considerando cual sería la mejor forma de que sepa cómo hacer las dos canciones porque contándole su vida no hará que eso sea así, hay que hacerlo con acciones. Por suerte no han pedido nada y solo se han sentado en una mesa, aunque se verá mal el momento en que se vayan sin siquiera haber visto el menú.

—Entonces, te llevaré a un lugar. No creo que eso te de iluminación divina o algo así, pero creo que podrás conocerme un poco más. ¿Con eso basta?

—¿Ah? ¿Y me contarás sobre tus metas? Camus-senpai me estuvo hablando por horas de algunos aspectos de él, de su hogar y sus metas mientras tomábamos té... él exagero con la azúcar...—Lo último lo dice en su susurro, pensativa en ese profundo gusto por el azúcar de su senpai.

—Algo así, pero no será lo mismo. Iremos a un festival de rock.

Sakura lo ve sin entender del todo como eso le ayudará a conocerlo un poco más, realmente prefiere que le cuente algo o se lo muestre de alguna manera más directa, algo que en un festival de rock no verá claro; prefiere evitar complicarse porque solo falta semana y media para que termine el mes, y quiere que al menos Ai cante por última vez con todos.

A pesar de que ayer le entregó los archivos a Hakase, no tiene mucha esperanza de que se pueda hacer algo de forma inmediata para que Ai siga con vida, con sus memorias y sea el mismo que conocen. Una persona con sentimientos tan reales como los de ellos. Se entristece de solo pensar en lo inevitable que se ve todo en el horizonte.

Ranmaru se da cuenta de que ella se ha quedado un poco ida, mirando la mesa con una expresión de desolación tal que parece a punto de llorar. No comprende qué puede habérsele pasado por la cabeza para que dé un momento a otro pase de estar normal a triste; duda mucho de que sea el hecho de ir a un festival de rock, ya se vio que el género es de su agrado, por lo que no entiende esa expresión.

—Oye, ¿qué te pasa de repente? ¿Tan mala es la idea de ir a un festival de rock que te pones como niña pequeña? Hacer berrinche no servirá de nada...—La mira fijamente en busca de una reacción, la cual consigue, aunque la mirada triste sigue ahí.

—¡¿Eh?! ¿Y qué te hace pensar que pretendo hacer berrinche?—cuestiona frunciendo la boca en desacuerdo—. Solo pensé en el fin de mes...

Kurosaki suaviza sus facciones sabiendo a que se refiere. Aunque en un principio ninguno de sus compañeros en Quartet Night le agradaba, especialmente Reiji y Camus, ahora se puede decir que son algo similar a amigos por lo que se siente un pesar ante la idea de la cercana muerte de Ai. Prefiere no pensar en eso, es más sencillo cumplir con lo pedido con el chico de esa forma.

Melodía de mí alma [Utapri]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora