© 𝐒𝐓𝐑𝐀𝐍𝐆𝐄𝐑 𝐅𝐑𝐎𝐌 𝐇𝐄𝐋𝐋 | Kookv

Capitulo 9

Taehyung estaba sorprendido, pero a la vez algo asustado. Veía la cabellera negra que portaba el mayor, quien se encontraba besando sus heridas con ganas. Entonces, soltó un chillido cuando JungKook raspó con su diente la herida abierta del menor.

-¡Oye! ¡No hagas eso, idiota! -exclamó Taehyung, pero JungKook pareció ignorarlo.

-Esto es demasiado enfermizo -dijo Taehyung.

-Claro que no, esto es normal -susurró Jeon.

Taehyung se retorcía en la cama cuando el mayor sacaba la lengua y delineaba la herida. JungKook saboreaba la sangre del menor con gusto. El olor a hierro comenzó a llegar a la nariz de Taehyung, quien hizo una mueca de asco.

-¡N-No! ¡Detente! -gritó Taehyung cuando sintió a JungKook succionar la herida.

El ardor se extendió por todo su cuerpo cuando hizo el amago de empujar al dentista, pero este mismo era inteligente y, antes de que Taehyung lo empujara, tomó los brazos del castaño y los posicionó sobre su cabeza.

Taehyung abrió los ojos de par en par, asustado.

-¿Puedes quedarte quieto, maldita sea? Quédate quieto en tu puto lugar, si no quieres que te corte esa piel de porcelana que tienes, Taehyung.

-¿Cómo quieres que me quede quieto si estás lamiendo las heridas que me hizo tu hermana? -dijo entre dientes Taehyung, reteniendo un grito de dolor cuando sintió la lengua del mayor adentrar la punta de su lengua en la herida.

Taehyung estuvo en un eterno sufrimiento por treinta minutos, eso fue lo que duró JungKook lamiendo las heridas. Cuando paraba, salía sangre de nuevo al haberlas abierto más. Entonces, seguía lamiendo, hasta que tuvo suficiente del sabor metálico del menor, quien estaba con el rostro completamente rojo y los ojos hinchados de tanto llorar. Sus labios estaban marcados por sus dientes al haberlos mordido tanto.

-E-Eres un i-idiota. Te odio -susurró dolido.

-Y me odiarás más, Taehyung. Ahora, levántate de la puta cama, que te vas a ir a bañar -le ordenó JungKook.

-N-No pu-puedo -le dijo entre sollozos-. M-Me duele la pierna.

JungKook rodó los ojos y cargó a Taehyung. Lo sentó en la orilla del retrete para comenzar a quitar lo que le quedaba de ropa.

Taehyung estaba incómodo; sentía las manos del mayor quitar la ropa y realmente se le hacía muy incómodo que alguien más lo viera desnudo. Así que, cuando JungKook lo volvió a cargar para llevarlo a la regadera y dejarlo ahí parado:

-Iré a preparar algo de comer. Apúrate -avisó.

Cuando estuvo a punto de salir, volteó de nuevo al menor, quien lo miró asustado:

-Más te vale no hacer una tontería porque tienes todas las de perder, Taehyung. Y cuando termines, me gritas para venir y cambiarte las vendas. El jabón y el champú están ahí -señaló un mueble.

Y con eso, JungKook salió, dejando en completa soledad al menor, quien se quejó cuando quitó las vendas de sus heridas.

-Maldita Na-yeon -susurró para sí.

Taehyung comenzó a pasar el jabón que el mayor le había señalado por su cuerpo magullado. Con sumo cuidado comenzó a lavar su cuerpo, tratando de no pasar por sus heridas, cosa que fue inútil, porque la espuma cayó en sus heridas, haciendo que sus ojos se aguajaran y las mismas ardieran horriblemente.

Lavó su cabello con suaves masajes, sintiendo cómo el agua tibia relajaba sus músculos levemente.

Cuando terminó de lavarse el cuerpo, cayó en cuenta de que JungKook no le había dado ropa.